La Asamblea Nacional francesa aprobó hoy la extensión del estado de emergencia por seis meses en medio de un clima de temor y violencia, que se profundizó luego del atentado cometido la semana pasada en Niza, al sur del país, por un conductor de camión que arrolló con su vehículo a una multitud y mató a 84 personas.

En la madrugada de hoy, los diputados aprobaron por 498 votos a favor y 26 en contra el artículo del proyecto de ley que extiende la medida de excepción hasta enero de 2017, en lugar de hasta octubre como había anunciado el presidente, Francois Hollande, justo un día antes del atentado ocurrido el 14 de julio, durante los festejos del feriado nacional.

Sin embargo, la presión de la oposición de derecha y ultraderecha obligó al gobierno socialista a ampliar más de lo previsto el estado de emergencia, vigente en el país desde los atentados del pasado 13 de noviembre en París.

Algunos legisladores del partido conservador Los Republicanos y de la extrema derecha trataron sin éxito de que la medida se prolongase un año, según la agencia de noticias EFE.

El primer ministro, Manuel Valls, quien se encargó de defender el texto ante los diputados, denunció los ataques de líderes de la derecha, incluido el ex presidente Nicolás Sarkozy, que habían reprochado al Ejecutivo no haber hecho lo suficiente para proteger al país del terrorismo.

Por su parte, la oposición a la izquierda del Partido Socialista volvió a votar en contra de la prolongación del estado de emergencia, una medida que a su juicio no servirá para atajar la amenaza terrorista.

La medida deberá ser examinada ahora por el Senado francés.

El proyecto de ley que regula el estado de emergencia, contiene también un endurecimiento de sus disposiciones, incluido un artículo que todavía tiene que ser votado por los diputados y que permite la inspección y registro de la información que contienen los teléfonos móviles y ordenadores incautados. Entretanto, la prefectura de policía de Paris ya anuló varios eventos multitudinarios previstos para el verano (boreal).

Se trata de la peatonalización de la avenida de los Campos Elíseos el próximo 7 de agosto, el festival de cine al aire libre en varios parques de París o el torneo de basketball Quai 54 en la pradera de Reuilly, que «no presentan garantías satisfactorias de seguridad».

Las medidas se tomaron después de reuniones con los organizadores de todas las las grandes manifestaciones programadas en la región este verano para examinar las condiciones de seguridad.

Se mantiene es la «playa» de París, en los muelles del Sena y en las orillas del canal de Saint Martin en La Villette, abierta hoy al público hasta el 4 de septiembre.

A la creciente sensación de inseguridad que se vive en Francia, donde en un año y medio hubo tres atentados, se suman una serie de disturbios registrados ayer tras la muerte de un joven de 24 años en la localidad de Persan, en el norte de Francia, donde 6 gendarmes resultaron heridos.

«Tenemos seis militares heridos por armas de plomo, afortunadamente de forma ligera», señaló Jean-Simon Mérandat, director de gabinete de la prefectura del departamento Val d’Oise, en declaraciones a la emisora France Info.