La incorporación de críticos del primer ministro renunciante Mario Draghi a la alianza electoral que habían acordado las dos principales fuerzas de la centroizquierda italiana, el Partido Democrático y Acción, hizo estallar el acuerdo a menos de una semana de su firma y vuelve a dar vida a la creación de un «tercer polo» para las elecciones del 25 de septiembre.
«Es una de las decisiones más sufridas, pero no quiero seguir adelante con esta alianza», dijo a última hora del domingo el líder de Acción, Carlo Calenda, al anunciar la rotura de la coalición que el martes pasado había firmado con el PD y con el izquierdista +Europa.
La decisión de Calenda se dio luego de que a primera hora del domingo el secretario general del PD, el ex primer ministro Enrico Letta, anunciara la incorporación a la coalición de Izquierda Italiana y los Verdes, dos fuerzas que fueron críticas del Gobierno del premier Mario Draghi, convertido en una bandera de la centroizquierda hasta su renuncia a mediados de julio.
La decisión de Calenda, que complica las posibilidades de la centroizquierda para las elecciones del mes que viene en las que la centroderecha es favorita, fue calificada como una acción «populista» por el PD, según publica este lunes el diario Repubblica.
Además de las dos fuerzas de ultraizquierda criticadas por Calenda, el líder de Acción tampoco aprobaba la incorporación a la alianza del canciller Luigi Di Maio y su reciente Compromiso Cívico, formado en junio como una escisión del izquierdista Movimiento Cinco Estrellas, plantearon fuentes legislativas a la agencia de noticias Télam.
Tras la ruptura con el PD, Calenda fue tentado a través de redes sociales por el ex premier Matteo Renzi para que Acción se una a su Italia Viva en la conformación de un denominado «tercer polo» que defienda la herencia de Draghi pero sin aliarse con quienes fueron sus críticos entre febrero de 2021 y el mes pasado.
«Nos candidateamos con un proyecto claro, comprensible para los italianos. Italia Viva y el tercer polo lo hacemos desde el centro, como alternativa a la confusión de izquierda y derecha, con la agenda de Draghi y su proyecto que ha relanzado nuestro país y que necesita continuidad», explicó el diputado y presidente de la fuerza de Renzi, Ettore Rosatto, en redes sociales.
El 25 de septiembre, Italia elegirá 400 diputados y 200 senadores que luego deberán votar un nuevo premier para suceder a Draghi, en una elección en la que la alianza integran Hermanos de Italia (extrema izquierda), la Liga y Fuerza Italia (derecha) parte como favorita.
