A pesar de que no hay una intervención internacional aprobada en Haití, la administración de Joe Biden envió al país al USCGC ‘Northland’ (WMEC 904), una importante embarcación de la Guardia Costera estadounidense, con la intención de «patrullar» las aguas en las inmediaciones de la capital de Haití, Puerto Príncipe.

Según la Guardia Costera de norteamericana, la embarcación, que desarrollaba tareas en Miami, fue enviada como «una clara señal de determinación de la determinación de Estados Unidos de apoyar al gobierno de Haití y a su gente».

Habitualmente el barco se dedica a patrullar las aguas desde el estado de Maine hasta Florida, el Golfo de México, el Océano Pacífico Oriental y el Mar Caribe.

«El Gobierno de Estados Unidos tiene un interés creado en la seguridad regional en todo el Mar Caribe y está al tanto de la situación actual de disturbios civiles y violencia de pandillas dentro de Haití», aseguró Brendan C. McPherson, comandante del Séptimo Distrito de Guardacostas, en declaraciones divulgadas por el Comando Sur estadounidense.

El jerarca estadounidense dijo además que la presencia de la Guardia Costera es solo «una parte del enfoque» de su gobierno en relación a Haití. Además de la Guardia Costera, Estados Unidos también envió aviones militares a Haití con equipos de seguridad táctica para el uso de la policía local.

El interés estadounidense de participar en una intervención en Haití ya había sido expresado el pasado 12 de octubre por Brian Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, luego de un encuentro con el primer ministro haitiano Ariel Henry. En esa reunión participaron también autoridades del Departamento de Defensa y del Comando Sur, repartición de las Fuerzas Armadas estadounidenses para operaciones en América Latina.

“Estados Unidos sigue siendo un socio firme del pueblo haitiano y seguirá apoyando a Haití en este momento crítico”, escribió Nichols en su cuenta de Twitter luego del encuentro.

Brian Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental (Twitter)

La presencia de cuerpos de la Marina, militares y policiales norteamericanos despierta en los haitianos un profundo rechazo debido a una historia marcada por intervenciones estadounidenses que, según reconocieron organismos como la Organización de Estados Americanos (OEA), no han hecho más que profundizar las problemáticas que afronta el país en materia de violencia, a nivel sanitario e incluso institucional.

Durante las últimas semanas los haitianos realizaron diversas protestas en contra del Gobierno de Henry y su pedido de apoyo internacional, justificado por nuevos brotes de cólera en el país, una crítica situación de seguridad debido al control extendido de las pandillas y una compleja crisis humanitaria.