El ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu, anunció este miércoles la retirada de las tropas rusas de la ciudad ocupada de Jerson, en el sur de Ucrania, con el objetivo de defender el margen izquierdo del río Dnieper, ante el avance de una contraofensiva ucraniana.

Shoigu pidió al comandante de las fuerzas rusas en Ucrania, Sergei Surovikin, que “comience con la retirada de las tropas y tome todas las medidas para garantizar la transferencia segura de personal, armas y equipos a través del río Dnieper”.

En relación a la situación del río Dnieper, desde Rusia temen que las tropas ucranianas ataquen la central hidroeléctrica de Kajovka, lo que generaría “un torrente de agua” que provocará inundaciones en muchas zonas. 

Surovikin, por su parte, advirtió que “habrá una amenaza adicional para la población civil y el completo aislamiento de las tropas en el margen derecho del Dnieper”, según la agencia de noticias rusa TASS, replicada por la española Europa Press.

“En estas condiciones, la opción más adecuada es organizar la defensa a lo largo de la línea de barrera del río Dnieper”, agregó el comandante.

“Además, parte de las fuerzas y medios serán liberados y utilizados para operaciones activas, incluso ofensivas en otros sentidos en la zona de operación”, explicó Surovikin.

Surovikin también indicó que la ciudad de Jersón y las poblaciones aledañas tienen problemas de abastecimiento debido a los constantes bombardeos ucranianos. En este sentido, sostuvo que “el enemigo ataca indiscriminadamente a la ciudad y se pueden utilizar métodos de guerra prohibidos”.

En referencia a las más de 115.000 personas que habitaban esta zona pero decidieron evacuar el lugar, el militar ruso apuntó: “Por nuestra parte, hemos hecho todo lo posible para garantizar su seguridad durante la evacuación”.

Previamente, Shoigu había recibido un informe de Surovikin en el que detallaba que “en la dirección de Donetsk, la derrota del enemigo en el margen derecho del río Bajmutka” se había completado.

Este anuncio se produce casi tres semanas después de que autoridades instaladas por Rusia en las provincias del sur de Ucrania llamaran a los civiles a partir “de inmediato” de la ciudad de Jerson.

A finales de septiembre, tras la anexión rusa de las provincias de Jerson, Lugansk, Donetsk y Zaporiyia, el Ejército ucraniano lanzó una contraofensiva que le permitió recuperar territorio en el este y el sur del país.

El avance ucraniano cobró recientemente un nuevo impulso en el flanco meridional de Jerson, la primera gran ciudad en caer en manos rusas después del inicio de la invasión de Ucrania a finales de febrero.

Las tropas rusas ya se habían visto obligadas a retirarse de la región de Jarkov en septiembre pasado.