El presidente de la compañía alemana Bayer, Werner Wenning, anunció su retiro este miércoles. El ejecutivo se retira bajo un contexto de muchas demandas, y con una compañía que vio desplomar el cuarto de su valor desde 2018.

«Aunque seguimos avanzando en el manejo de los problemas legales en Estados Unidos, hemos progresado. Por ello creo que es un buen momento para dar paso a mi sucesor», ha señalado Wenning.

Se trata de Norbert Winkeljohann que ha sido jefe de la firma de auditoría PricewaterhouseCoopers Europe SE hasta junio de 2018 y ha sido miembro del consejo de supervisión de Bayer desde 2018.

El cambio se hará efectivo el próximo 28 de abril, tras la reunión anual de accionistas de la compañía.

Las demandas en EE.UU no cesan

La ola de demandas judiciales a las que se ve enfrentado el gigante químico-farmacéutico alemán Bayer en Estados Unidos a causa de los posibles riesgos cancerígenos de herbicidas con glifosato como principio activo volvió a aumentar de manera drástica.

Ken Feinberg, mediador entre las partes en conflicto, señaló que el número de demandas se elevó ahora a entre 75.000 y 85.000 o incluso más, en declaraciones efectuadas al servicio financiero Bloomberg, según la agencia DPA.

La última vez que Bayer brindó datos sobre esas cifras fue en octubre, que con aproximadamente 42.700 ascendió a más del doble que en julio de 2019.

Sin embargo, la compañía alemana contradijo de modo decidido los últimos datos de Feinberg.

En una declaración, Bayer adujo que la cifra mencionada por el mediador era una «estimación de carácter especulativo» que incluía demandantes potenciales que podrían ser incluidos en un posible acuerdo.

En ese sentido, Bayer indicó ahora que si bien el número de demandas aumentó, este se encuentra «muy por debajo de 50.000».

Feinberg, que fue nombrado como conciliador en junio, consideró posible llegar a un acuerdo a corto plazo y se mostró «cautelosamente optimista» en relación a la posibilidad de alcanzar un arreglo en el plazo de un mes aunque no quiso hacer comentarios acerca de las condiciones de un posible acuerdo.

En 2018, Bayer asumió inmensos riesgos legales con la compra del gigante de semillas estadounidense Monsanto por más de 60 mil millones de dólares y ya perdió tres procesos en Estados Unidos.