«Amigo, ¿escuchó el vuelo negro de cuervos en nuestras llanuras, eso es lo que le dije al fiscal». Esas fueron las palabras de Gaspard Glanz a la salida del Tribunal de París, el pasado lunes 22 de abril.

El periodista será juzgado el 18 de octubre en la Corte parisina por «desacato a cualquier persona a cargo de la autoridad pública», tras ser detenido el pasado sábado en medio de una nueva protesta de los “chalecos amarillos”.

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Glanz afirmó que “volvería a ir a la manifestación este sábado y a la del 1 de mayo” a pesar de “la prohibición que está vigente”, ya que consideró que es su “trabajo” y que vive “en París»

Gaspard Glanz, detenido por efectivos de la CRS.

“He sido periodista durante diez años y continuaré con o sin una prohibición, no tengo miedo”, agregó el reportero.

El periodista, acusado de haber hecho un dedo de honor (“fuck you”) a la Compañías Republicanas de Seguridad (Compagnies républicaines de sécurité – CRS), tiene prohibido viajar a París todos los sábados y el 1 de mayo después de ser arrestado el sábado pasado en una reunión de «chalecos amarillos» .

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La decisión deriva en particular, según afirmaron desde la autoridad policial, del hecho de que “su estatus como periodista independiente no se reconoce de acuerdo con él”

«He sido periodista durante diez años, especialista en movimientos sociales y en todas las marcas de medios que veo a mi alrededor, ya he trabajado todos», declaró Gaspard Glanz cuando abandonó la sede capitalina de la Corte, este lunes.

«Pero ante sus ojos, no soy periodista, allí, mi solicitud de una tarjeta de prensa sale mañana, y sé muy bien que con esta tarjeta, todo esto no habría sucedido. Es un punto de no retorno muy grave», denunció.

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Por último, Gaspard Glanz admitió haber «escapado» de las fuerzas, pero sostuvo que fue víctima de la violencia: «Había tomado una granada, todavía tengo el agujero en los pantalones, hubiera preferido no hacerlo».