El papa Francisco afirmó este jueves estar «profundamente conmovido» por las víctimas y los «enormes daños materiales» causados por el huracán Harvey en Texas y en Luisiana (EEUU).

«Profundamente conmovido por las trágicas pérdidas de vidas humanas y los enormes daños materiales que esta catástrofe natural ha dejado tras de sí, él reza por las víctimas y sus familias y por todos aquellos que participan en las actividades esenciales de socorro, de recuperación y de reconstrucción», indicaba un telegrama.

El texto fue enviado en nombre del papa, como es costumbre, por su número 2, el cardenal secretario de Estado Pietro Parolin, y fue dirigido al arzobispo de Galveston-Houston, el cardenal Daniel DiNardo.

El papa argentino también expresó su «proximidad espiritual y su preocupación pastoral» respecto a los afectados por el huracán.

Además, afirmó su convicción de que «las necesidades inmediatas, tanto de los individuos como de las comunidades, seguirán inspirando un gran impulso de solidaridad y de solidaridad mutua».

Harvey, que llegó a Texas como huracán para después convertirse en tormenta, ha dejado al menos 33 muertos y causó daños que se estiman en miles de millones de dólares.