El papa Francisco bendijo hoy el palio a monseñor Eduardo Eliseo Martín, de Rosario, uno de los 46 nuevos arzobispos nombrados este año por el pontífice.

«Queridos arzobispos, el palio que hoy recibís es un signo que representa la oveja que el pastor lleva sobre sus hombros como Cristo, Buen Pastor, y por tanto es un símbolo de vuestra tarea pastoral, es un signo litúrgico de la comunión que une a la Sede de Pedro y su Sucesor con los metropolitanos y, a través de ellos, con los demás obispos del mundo», aseveró Francisco en su mensaje durante la celebración eucarística por la solemnidad de San Pedro y San Pablo.

¿Qué es el palio? Es un ornamento que tiene una franja de lana blanca decorada con cruces negras, que simboliza la oveja sobre los hombros del Buen Pastor y que usan el Papa y los arzobispos metropolitanos como signo de la comunión con Roma.

«Hoy, junto con el palio, quisiera confiaros esta llamada a la oración, a la fe y al testimonio», agregó, al tiempo que aseguró a los nuevos obispos que la iglesia «los quiere hombres de oración»; así como «de fe» y «de testimonio», ya que «no hay testimonio sin una vida coherente», según leyó el Santo Padre, en italiano, durante la ceremonia de casi dos horas celebrada en la basílica de San Pedro.

En el Vaticano desde la semana pasada, Martín se entrevistó con Francisco el pasado jueves, reunión durante la cual el pontífice le aconsejó especialmente “pacificar” la arquidiócesis y estar cercano a la gente, informó la Agencia Informativa Católica Argentina (AICA).

Martín, que nació en diciembre de 1953 y completó sus estudios superiores en la Facultad de Teología de Buenos Aires, fue ordenado sacerdote en la diócesis de Venado Tuerto en 1980 y en 2006 fue nombrado obispo de la diócesis de Villa de la Concepción del Río Cuarto.

Oficialmente, Martín comenzará a utilizar el palio luego de un acto en Rosario al que asistirá el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig.

Según una carta firmada por el Maestro de Ceremonias Pontificias, Guido Marini, los metropolitanos lo reciben en privado y después será el nuncio apostólico del respectivo país quien lo imponga en la diócesis de origen, para resaltar la «sinodalidad».

Hasta ahora, según la nota vaticana, el palio era «impuesto» a los nuevos arzobispos metropolitanos nombrados durante el año anterior en la misa celebrada por el Pontífice en San Pedro, el día de la fiesta de los santos Pedro y Pablo, el 29 de junio.

«El Papa dispuso que el palio bendecido en la misa de los santos Pedro y Pablo sea impuesto a los arzobispos metropolitanos en sus residencias diocesanas por un representante», explicó Marini a comienzos de año.

Junto al arzobispo de Rosario, otros 45 religiosos recibieron la bendición del palio del Santo Padre, entre ellos nuevos arzobispos de Cochabamba (Bolivia), Curitiba (Brasil), Durango y Yucatán (México), Asunción (Paraguay) y Cuzco (Perú).