El papa Francisco encabezó hoy ante miles de peregrinos el Vía Crucis de Viernes Santo frente al Coliseo en Roma. El sumo pontífice hizo un guiño a las 147 víctimas asesinadas ayer -la mayoría cristianos- en una universidad en Kenia por fundamentalistas musulmanes.

«Son perseguidos, decapitados y crucificados ante nuestros propios ojos y, a menudo, con nuestro silencio cómplice», dijo Francisco.

«En la crueldad de tu Pasión, Señor, vemos la crueldad de nuestras acciones y a todos los abandonados por los familiares, por la sociedad. En tu cuerpo herido vemos a aquellos desfigurados por nuestra indiferencia», sostuvo el Pontífice al término del Vía Crucis.

Luego, recordando la crucifixión de Jesús, se prenguntó: «¿Cuándo será abolida la pena de muerte, practicada todavía hoy en día en numerosos Estados? ¿Cuándo será borrada toda forma de tortura y la supresión violenta de personas inocentes?»

Las 14 estaciones que recorrió Jesucristo desde Jerusalén hasta su crucifixión, según la tradición católica, fueron recordadas con meditaciones y oraciones. Durante la ceremonia también se recordaron problemas actuales como la falta de libertad de religión, el tráfico de personas, los niños soldados y la pena de muerte.

Más temprano, Francisco encabezó la tradicional liturgia de Viernes Santo en la Basílica de San Pedro, en el Vaticano, una ceremonia cargada de silencio y gravedad en recuerdo de la pasión de Cristo.

Al comienzo de la misa los sacerdotes se arrodillaron frente al altar y el pontífice argentino años rezó acotado sobre de cara contra el suelo.

Tras ello, leyó la historia de la pasión de Jesucristo y se procedió a la adoración de la cruz, mientras a través de su cuenta de Twitter expresaba: «La Crucifixión de Cristo no es una derrota: la cruz es amor y gracia».

Durante las 14 estaciones del Vía Crucis se reza por los que padecen diferentes sufrimientos, entre ellos las víctimas de persecuciones religiosas, las familias en dificultad y la explotación de menores.

También se proponen los sentimientos y pensamientos de Jesús durante su pasión.
Las celebraciones del Papa durante la semana santa son siete: las dos de ayer, dos hoy, una mañana y dos el domingo.

La conmemoración de mañana tendrá lugar por la noche, cuando a las 20.30 comience la vigilia pascual.

En tanto, el domingo a las 14.15 está prevista una la misa, mientras que se espera para el mediodía que Francisco imparta la bendición «urbi et orbi» desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, para desear felices pascuas y bendecir a la ciudad y al mundo, según la agencia italiana.