El registro histórico de personas desparecidas en México desde el 2006 hasta la fecha contiene más de 77.000 casos y el récord anual ocurrió en 2019, primer año de mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador, informó hoy el Gobierno mexicano.

«El registro histórico nos señala, de 2006 a la fecha, un total de 77.171 personas reportadas como desaparecidas, de las que el 18% se acreditaron en los dos últimos años», dijo el subsecretario federal de Derechos Humanos, Alejandro Encinas.

«Tenemos que reconocer que el año de mayor número de denuncias se presentaron por desaparición o personas no localizadas en el 2019, con 8.345», agregó Encinas en conferencia de prensa, citado por el servicio de radiodifusión ruso Sputnik.

Este año, el registro hasta septiembre es de 4.260 personas desaparecidas, lo que apuntaría hacia una reducción, dijo Encinas, responsable de protección de los derechos humanos en la secretaría de Gobernación, encargada de la política interior.

En ese lapso fueron encontradas 4.092 fosas clandestinas, de las cuales se exhumaron 6.090 cuerpos.

El 50% de esos hallazgos en todo el país ocurrieron en los estados orientales de Veracruz y Tamaulipas, en el sureño Guerrero y los norteños Sinaloa y Zacatecas.

En Veracruz y Tamaulipas se localiza una ruta de tráfico ilegal de personas indocumentadas, trata de personas y drogas hacia Estados Unidos.

Un dato novedoso es el crecimiento de la desaparición de personas en la Ciudad de México.

En la capital mexicana, ese crimen es resultado de secuestros y trata de personas, mientras que en resto del territorio, casi el 90% se debe a la violencia del crimen organizado, explicó Encinas.

Además reveló que, en la mayor parte del territorio donde esta práctica se mantiene, involucra a agentes de corporaciones policiales municipales.

De las 189.000 personas reportadas desaparecidas, 112.000 ya fueron localizadas, lo que explica la cifra de 77.000 desapariciones en total.

Un 93% estaba con vida, que suman unas 104.000 personas; otras 7.082 se localizaron muertas, es decir, el 6,32% de las denuncias; el resto permanece sin localizar.

En 14 años de violencia, generada sobre todo por el crimen organizado y el enfrentamiento de las fuerzas armadas, se estiman 310.000 muertos en todo el país.

Como principal estrategia, el Gobierno de López Obrador promovió una reforma constitucional para crea una Guardia Nacional, a partir de integrantes de las Fuerzas Armadas, y desarticuló a la antigua Policía Federal, a la que señalaba por corrupción.