La pandemia de coronavirus dejó una pérdida de 285.600 empleos en el primer trimestre del año en España, teniendo en cuenta que sólo afectó las dos últimas semanas de marzo, un período en el que más de medio millón de personas también fueron suspendidas de su trabajo.

«El número de ocupados disminuye en 285.600 personas en el primer trimestre de 2020 respecto al trimestre anterior (un -1,43%) y se sitúa en 19.681.300», según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Se trata del mayor descenso en la serie histórica desde 2013, de acuerdo con los registros oficiales.

El INE informó que la caída de la ocupación no incluye a los trabajadores afectados por un ERTE (Expediente de Regularización Temporal de Empleo), pero explicó que 562.900 ocupados declararon «no haber podido trabajar» por un paro parcial de su empresa o por haberse visto afectados por esta medida de suspensión temporal del empleo.

En cuanto a la tasa de desempleo, se incrementó hasta el 14,41% con 121.000 personas más, lo que representa la mayor suba en siete años.

El número total de desempleados se sitúa ya en 3.313.000 personas, según la EPA.

Por otro lado, el estudio registra un aumento de 257.500 inactivos, algo que no tiene precedentes.

El INE señaló que la declaración del estado de alarma «ha tenido importantes repercusiones sobre la EPA del primer trimestre de 2020», tanto en la realización de entrevistas como en las variables medidas, y que los efectos de la Covid-19 se ven reflejados en parte del estudio.