El movimiento Revolución Ciudadana, que lidera el expresidente Rafael Correa, eligió a la exasambleísta Luisa González como candidata a la presidencia de Ecuador, luego de que el exvicepresidente Jorge Glas declinara la candidatura para evitar problemas con su inscripción al estar inmerso en procesos judiciales. El economista Andrés Arauz, delfín de Correa, será el candidato a vicepresidente de la fórmula opositora.

Los partidos y movimientos ecuatorianos tenían plazo hasta el sábado para oficializar sus candidatos a las elecciones presidenciales y legislativas anticipadas, previstas el 20 de agosto, y hasta el 13 de junio para su inscripción. Las autoridades electas en las urnas podrán ejercer el cargo hasta mayo de 2025, con lo cual completan el periodo para el cual fue electo el gobierno de Guillermo Lasso, quien puso fin a su gobierno al activar la «muerte cruzada» previo a la votación en un juicio político en su contra por presunto peculado.

“Vamos a volver…”

«Vamos a tomar al toro por los cuernos y vamos a enfrentar las causas generadoras de la violencia y de la delincuencia, como lo son el hambre, la pobreza, la falta de educación, la ausencia de oportunidades», declaró González en un discurso en Portoviejo, capital de la provincia de Manabí, bastión de los seguidores de Correa.

«Tengo la fuerza, la capacidad, el valor para liderar» la misión encomendada por la Revolución Ciudadana, comentó González, quien dijo ser la cara del «renacer de la Patria». González, quien fue Secretaria Nacional de la Administración Pública, cónsul general de Ecuador en Alicante, España, y Secretaria General en la Superintendencia de Compañías, Valores y Seguros, aseguró que «el país no está para improvisar, está para actuar».

En un principio el movimiento correísta había anunciado una dupla conformada por el exvicepresidente Glas como candidato a presidente y González como vice, pero debió celebrar una nueva elección dado que el político declinó al cargo argumentando que no podía poner en riesgo la inscripción, y lo propuso a Andrés Arauz para la vicepresidencia. En 2021 Arauz perdió contra el embanderado del anticorreísmo, el actual presidente Guillermo Lasso, del movimiento conservador Creando Oportunidades (CREO) y aliado del Partido Social Cristiano, que sacó más del 52 por ciento de los votos.

Al tomar el micrófono en la asamblea correísta donde había sido elegido candidato por unanimidad, Glas volvió a declararse junto al expresidente Correa como un perseguido político y víctima del lawfare, pero comentó que no puede poner en riesgo la inscripción. Glas, de 53 años, estuvo detenido desde diciembre de 2017 hasta noviembre de 2022, cuando la justicia le otorgó libertad condicional, y actualmente está a la espera de que la justicia unifique sus dos condenas por corrupción. El viernes un juez le había concedido al exvicepresidente ecuatoriano una medida cautelar para que pudiera participar en las elecciones extraordinarias que se celebrarán en agosto.

De esta forma, González se perfila como la única candidata mujer entre los principales movimientos políticos de Ecuador, cuyos precandidatos son en su gran mayoría hombres. Lasso oficializó la semana pasada que no iba a postularse, luego de que dispusiera por decreto la llamada «muerte cruzada», que disuelve el Parlamento y convoca a elecciones anticipadas, previo a una votación en el legislativo en un juicio político en su contra por presunto peculado.