Una cuarta fuga fue detectada en los gasoductos Nord Stream que conectan a Rusia con Alemania a través del mar Báltico y que podrían haber sido objeto de un sabotaje relacionado con la guerra en Ucrania, informó hoy la Guardia Costera de Suecia.

Los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2 discurren casi en paralelo y están en el centro de las tensiones desencadenadas en torno a un corte del envío de gas ruso a Europa en aparente respuesta a las sanciones occidentales por la invasión de Ucrania.

Acusada por Ucrania de haber saboteado las tuberías tras reportarse explosiones submarinas anteriores a las fugas, Rusia se defendió señalando a Estados Unidos y convocó para mañana una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU por la cuestión.

«Es muy difícil imaginar que un acto terrorista de este tipo pueda ocurrir sin la participación de un Estado», dijo hoy el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, que pidió «una investigación urgente».

La Comisión Europea (CE), el Ejecutivo de la Unión Europea (UE) dijo hoy que esperaba el resultado de investigaciones iniciadas por algunos países del bloque afectados por las fugas y llamó a sus miembros a reforzar la seguridad de sus infraestructuras críticas.

«Hay dos fugas del lado sueco y dos fugas del lado danés», declaró la Guardia Costera sueca, que precisó que las dos fugas en su territorio se encuentran «cerca una de la otra», en aguas internacionales, como las otras dos, informó la agencia de noticias AFP.

El cuarto escape está situado en el noreste de la isla danesa de Bornholm, por encima del gasoducto Nord Stream 2, precisaron los guardacostas suecos en un comunicado.

Hasta ahora, las autoridades de los dos países escandinavos habían informado de tres fugas, dos en Dinamarca y una en Suecia.

Las primeras fugas fueron detectadas después de dos explosiones registradas el lunes por la mañana y la noche por los institutos sismológicos de Suecia, Noruega y Dinamarca.

Los guardacostas suecos no pudieron precisar de inmediato el motivo de la detección tardía de este nueva fuga. Pero las dos fugas en su zona están situadas en el mismo sector, indicaron.

En el caso de las fugas danesas, se encontraban una en cada gasoducto.

Estas fugas están provocando burbujeos de varios metros de largo en la superficie del mar que hacen imposible la inspección inmediata de los conductos, según las autoridades.

Los gasoductos, operados por un consorcio controlado por el gigante ruso Gazprom, no están operativos debido a la guerra en Ucrania, pero todavía están llenos de gas.

Dinamarca dijo que los escapes continuarán hasta que se agote el gas de los ductos, algo que debería ocurrir el domingo.

De acuerdo con grupos medioambientales, los gasoductos Nord Stream 1 y 2 contenían alrededor de 350.000 toneladas de gas natural-metano.

Greenpeace aseguró que las fugas pueden liberar casi 30 millones de toneladas dióxido de carbono, lo que equivale a dos tercios de las emisiones anuales de Dinamarca.

Hoy, la OTAN dijo que los daños en estas infraestructuras habían sido «deliberados, irresponsables actos de sabotaje».

«Las fugas están causando riesgos para los barcos y un sustancial daño medioambiental», dijo la alianza militar en un comunicado.

Rusia negó estar detrás de las explosiones e insinuó que podrían haber sido saboteados por Estados Unidos, que respondió que eso era ridículo.

El Servicio de Seguridad Federal (FSB) de Rusia lanzó una investigación de «terrorismo internacional» sobre las fugas y dijo que estas habían provocado «un daño económico significativo» para el país.

Dinamarca también anunció una investigación.

En rueda de prensa en Bruselas, la vocera de la CE, Dana Spinant, dijo hoy que Bruselas estaba en contacto con socios como Dinamarca y espera el resultado de las investigaciones llevadas a cabo para determinar el origen de las fugas.

«Estamos esperando para que revelen que es lo que pasó. Podemos tomar medidas para abordar esto o prevenirlo si sabemos que cual es la causa, pero todavía no estamos en ese punto», señaló.

«Por un lado vamos a trabajar para apoyar a la investigación de las causas de las fugas en Nord Stream y, por otro lado, trabajamos con los Estados miembros para ver como podemos elevar la protección de estas infraestructuras», agregó.