Luego de haber admitido que tuvo acciones en un fondo de inversión en un paraíso fiscal, David Cameron confirmó que publicará su declaración de bienes.

En una encuentro con activistas conservadores en Londres, Cameron admitió hoy fallos en la forma en que abordó sus asuntos financieros a raíz de las revelaciones contenidas en los papeles de Panamá, en los que aparecía un fondo de inversión creado por su padre, Ian.

«Esta no ha sido una gran semana», dijo el primer ministro, dos días después de haber admitido en una entrevista que se benefició de un fondo de inversión de su padre antes de llegar al poder.

«Sé que hay lecciones que aprender y aprenderé. No culpen al número 10 de Downing Street (la residencia oficial) o a asesores sin nombre, es mi culpa», afirmó Cameron antes de confirmar que publicará su declaración de Hacienda de años pasados porque quiere ser «transparente» sobre esta situación.

«Seré el primer jefe de Gobierno, el primer líder de un gran partido político que lo hace y creo que es lo que hay que hacer», sostuvo Cameron, que el jueves admitió haber tenido acciones en un paraíso fiscal pese a que días antes lo había negado.

El reconocimiento le ha valido a Cameron las críticas de la oposición laborista, que ayer sugirió que debería renunciar y lo calificó de «hipócrita» por haber dado tantos «sermones» sobre evasión fiscal mientras él evadía impuestos en un fondo de inversión en Panamá.

Asimismo, miles de personas se han dado cita frente a la residencia oficial para exigir al primer ministro que combata la evasión fiscal o presente su renuncia, informó la agencia EFE.

«Cierra las lagunas fiscales o dimite», decían los carteles que portaban algunos de los ciudadanos británicos que acudieron a Downing Street convocados por varias organizaciones, entre ellas la llamada Asamblea del Pueblo, formada por partidos de izquierda y sindicatos para combatir las medidas de austeridad.

El secretario de la Asamblea del Pueblo, Sam Fairbairn, acusó hoy a Cameron y a los conservadores de formar un «gobierno de ricos» y de estar sumidos en varias crisis por los problemas en el sector del acero del Reino Unido y las huelgas de los médicos residentes.

En una entrevista con la cadena ITV, Cameron explicó el jueves que tuvo en su poder acciones por valor de más de 30.000 libras (42.400 dólares) en un fondo de inversión en Bahamas, pero que todas las transacciones estuvieron sujetas a los impuestos del Reino Unido.