Alemania comenzó hoy la reapertura de sus fronteras con otros países vecinos pertenecientes a la Unión Europea, a pocos días de comenzar el verano y luego de tres meses de controles para mitigar la expansión de la pandemia del coronavirus, pero pidió cautela a la hora de realizar viajes y recomendó no viajar a Noruega, Suecia, Finlandia y España.
El levantamiento general de las restricciones significa que a partir de ahora ya no será necesario acreditar una razón de peso para acceder a Alemania y que, junto con objetivos como el turismo y las visitas, será posible cruzar la frontera desde el país vecino para realizar compras.
Los controles terrestres que permanecían en las fronteras con Austria, Francia, Suiza y Dinamarca fueron retirados este lunes, cuando desde las primeras horas del día pudieron verse largas colas autos cerca de los límites daneses.
El ministro de Exteriores, Heiko Maas, informó hoy que a partir de la medianoche de ayer también se levantaron los controles aeroportuarios para estos tres países e Italia, mientras que se mantendrán para Suecia, Finlandia y España, países que junto con Noruega, Mass recomendó no viajar, informó la agencia de noticias EFE.
La restricción con España, uno de los destinos favoritos de los alemanes para pasar el verano, responde a una cuestión de «reciprocidad» basada en la decisión española de retirar los controles el próximo 21 de junio, cuando reabra sus fronteras con el resto de la UE.
El gobierno alemán había decidido el 10 de junio prolongar hasta el 31 de agosto la recomendación de no viajar al extranjero para todos los países a excepción de los socios comunitarios -menos España-, los asociados a Schengen -menos Noruega- y el Reino Unido, consignó la agencia española.
El ministro recordó que en el caso de los países nórdicos, sobre todo Suecia, las autoridades alemanas vigilan que no se supere la tasa de 50 nuevos contagios por cada 100.000 habitantes como regla para mantener o no la recomendación de no viajar.
Maas explicó que en los países donde haya rebrotes o cierre de fronteras habrá apoyo consular a los alemanes que hayan viajado allí, pero precisó que no habrá aviones fletados por las autoridades alemanas, sino que se tendrían que utilizar conexiones regulares para afrontar eventuales repatriaciones.
En relación a países terceros, como Turquía, otro de los destinos turísticos preferidos de los alemanes, el ministro explicó que se están manteniendo conversaciones con las autoridades para analizar si se levanta la recomendación general de no viajar.
«Aquel que piense que vamos a poder pasar unas vacaciones como las pasábamos en el pasado se va a llevar este verano una sorpresa», resumió el ministro e indicó a sus compatriotas que deben afrontar las decisiones sobre sus próximas vacaciones de verano.
