El editorial principal del diario chino en inglés Global Times del 5 de julio, es un comentario devastador que ridiculiza al secretario del Exterior del Reino Unido, Jeremy Hunt, quien amenazó a China por la situación de Hong Kong. Pero lo interesante es que golpea al imperio británico donde más le duele.

Hunt ha estado haciendo declaraciones escandalosas en las que hace responsable a China por el caos que se ha desatado recientemente en Hong Kong, donde los anarquistas financiados desde el exterior han ocupado y vandalizado el recinto del Yuan Legislativo (parlamento), en donde han colgado en la tarima la antigua bandera colonial (como la bandera confederada el sur estadounidense). Hunt amenazó con “serias consecuencias” a China por socavar de algún modo la democracia de Hong Kong.

“Casi todos los analistas piensan que Hunt se está dando ínfulas”, declara el editorial. “Nadie cree que el Reino Unido va a enviar a su único portaviones a las costas de China. Nadie cree tampoco que el Reino Unido castigará a Pekín a costas de dañar el comercio con China. El Reino Unido ha quedado eclipsado por China en términos militares y de comercio”, agrega.

Dicen que si el Reino Unido expulsa a los diplomáticos chinos, como hicieron con Rusia, el resto de Europa no le va a hacer caso, “y lo único que logrará el Reino Unido es aislarse a si mismo”.

Hunt, explica el editorial, anda en un intento frenético por derrotar a Boris Johnson en la selección del partido Tory para el primer ministro en sustitución de Theresa May. “Al cargo de la diplomacia, Hunt cree que el tema de Hong Kong es una oportunidad que le cayó en las manos a él y al Reino Unido. Pero este no es el silgo 19 cuando estalló la Guerra del Opio. Al Reino Unido ya se le pasó su hora”, señala.

“Obviamente Hunt cree que el pueblo británico puede ser manipulado como un rebaño de ovejas”, y “obviamente Hunt es fuerte por fuera pero débil por dentro. Hasta el pueblo británico piensa que su actuación es divertida”.

En conclusión, destacan la ironía de que “en unos cuantos años, en un minuto el Reino Unido declara que sus relaciones con china están en la ‘edad dorada’, y en el minuto siguiente advierten a Chin de las ‘serias consecuencias’. Bajo tales circunstancias, no debemos de tomar demasiado en serio las cosas cuando se trata del Reino Unido”.