Miles de personas volvieron a salir hoy a las calles de varias ciudades de Chile para protestar contra el régimen de capitalización individual para las jubilaciones vigente desde 1981 y el movimiento organizador de esas manifestaciones convocó a un plebiscito informal para fines de este mes, con el objeto de expresar adhesión a la idea de estatizar el sistema.

Los manifestantes rechazaron el proyecto enviado a principios de agosto al Congreso por la presidenta Michelle Bachelet, que postula reformas al sistema privado de jubilación pero no su eliminación.

«El hecho de que el gobierno haya mantenido el gigantesco ahorro de propiedad de los trabajadores al servicio de los grandes grupos económicos es la constatación concreta de que la instituciones del Estado no pueden resolver el problema de las pensiones de los chilenos», afirmó Luis Mesina, vocero del movimiento No+AFP (sigla de administradoras de fondos de pensión).

Mesina llamó a participar, el 29 y el 30 de este mes, y el 1 de octubre, de un plebiscito «fuera de la institucionalidad, autogestionado, autofinanciado y que busca justamente tensionar políticamente las instituciones del Estado de manera tal de restituir la soberanía del pueblo», consignó la agencia ANSA.

Los organizadores calcularon en 50.000 los asistentes a la marcha en Santiago, lejos del medio millón estimado en una manifestación similar realizada en julio.

Las AFP registraban a junio pasado activos por 190.272 millones de dólares, 13,2 por ciento más que en igual mes de 2016.