El Gobierno canadiense aseguró que las mujeres estadounidenses que no puedan interrumpir sus embarazos en su país podrán hacerlo en Canadá, en pleno debate sobre la potencial anulación de un fallo que autorizó el aborto en Estados Unidos.

«Si vienen aquí y necesitan acceso (al aborto), es un servicio que les proveeríamos», dijo durante la noche de este miércoles la ministra de Familias canadiense, Karina Gould, durante una entrevista con la televisión pública CBC.

Un día antes, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, había defendido el «derecho a elegir» de las mujeres.

Esta semana, un sitio de noticias estadounidenses publicó un borrador que le fue filtrado con un dictamen preliminar de la Corte Suprema de Estados Unidos a favor de anular el fallo de Roe vs. Wade de 1973, que garantizó el derecho al aborto durante casi 50 años.

Si el fallo efectivamente se anulara, el acceso al aborto quedaría restringido en Estados Unidos, a merced de medidas que puedan tomar por separado cada uno de los 50 Estados del país.

El presidente estadounidense, Joe Biden, se manifestó en contra de la posible anulación y abogó por consagrar el derecho al aborto con una ley aprobada en el Congreso, algo que parece imposible con la actual composición parlamentaria.