El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, aseguró en las últimas horas que fue el Gobierno de Donald Trump (2017-2021) quien le brindó apoyo en su lucha contra las pandillas, en respuesta a declaraciones del Departamento de Estado norteamericano sobre la ayuda de la administración actual.

Este lunes, una publicación en Twitter del portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, aseguró que Washington «continúa apoyando a El Salvador en sus esfuerzos por reducir la proliferación de pandillas».

Price también exhortó a El Salvador a «defender las libertades civiles, incluida la libertad de prensa», en alusión a una reciente ley que castiga con hasta 15 años de prisión lo que las autoridades consideren como difusión de mensajes de pandillas en medios de comunicación.

Bukele asegura que su país sí recibió apoyo del Gobierno de Estados Unidos para combatir el crimen «pero fue bajo la administración Trump» escribió Bukele en la misma red social.

«Ustedes ahora están apoyando a las pandillas y sus ´libertades civiles´», escribió el presidente, citado por la agencia de noticias AFP.

Hace dos semanas Bukele le declaró la «guerra» a las pandillas que operan en su territorio, principalmente la Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18, luego de una escalada de violencia que entre el 25 y el 27 de marzo dejó 87 personas muertas.

A su solicitud el Congreso, controlado por el oficialismo, decretó un régimen de excepción, que permite detenciones sin orden judicial, y se reformaron leyes para castigar con hasta 45 años de prisión a quienes pertenezcan a pandillas.

Como prueba del cese de la ayuda de la gestión del presidente Joe Biden, Bukele recordó que en mayo de 2021 la agencia de cooperación estadounidense Usaid redirigió hacia entidades de la sociedad civil la asistencia que proporcionaba a instituciones del gobierno.

El recorte de ayuda ocurrió luego de que Bukele, con apoyo del Parlamento, destituyó a magistrados de la Corte Constitucional y al Fiscal General, medidas que, para Washington, atentaron contra la separación de poderes en el país.

El secretario de Estado, Antony Blinken, expresó el domingo su «preocupación» por la ola de violencia provocada por las pandillas, así como por las reformas impulsadas por Bukele que «criminalizan» el trabajo de la prensa.

Blinken consignó que Washington seguirá «apoyando» a El Salvador en «reducir la proliferación de las pandillas» y recordó que desde 2008 su país ha invertido 411 millones de dólares para «mejorar» la seguridad ciudadana en la nación centroamericana.

Hasta el domingo, 9.634 presuntos pandilleros habían sido detenidos en los últimos 16 días, según la Policía.

Las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18, entre otras, suman unos 70.000 miembros en el país, de los cuales más de 25.000 estarían actualmente en la cárcel.