La Cámara de los Comunes asumirá el próximo miércoles el control del proceso parlamentario del Brexit con una serie de «votaciones indicativas» para conocer las opciones que pueda tener el Reino Unido sobre su salida de la Unión Europea (UE), en una jornada que expondrá, ante todo, la pérdida de liderazgo del gobierno de Theresa May en este tema.

La debilidad de la primera ministra se profundizó hoy cuando Sammy Wilson, el vocero para el Brexit de sus aliados en el Parlamento -los norilandenses del DUP-adelantó que sería mejor postergar la salida de la UE durante un año a votar el plan de May.

En tanto, crecieron las versiones en los medios británicos de una negociación dentro del oficialismo conservador para conseguir el apoyo de los sectores rebeldes a cambio de la renuncia de la primera ministra.

Esta semana no se definirá el futuro del Brexit, pero sí podría definirse el futuro del gobierno de May.

Después de meses de parálisis, derrotas legislativas del gobierno y de una crisis política que parece no tener fin, la cámara baja del Parlamento británico aprobó anoche una enmienda que habilita a los diputados a buscar planes alternativos al que propone May y ya fue rechazado por amplias mayorías dos veces en el pleno.

La enmienda fue propuesta por los diputados oficialistas Oliver Letwin y Dominic Grieve y el laborista Hilary Benn, y aprobada con 329 votos a favor y 302 en contra.

Tres secretarios de Estado -Richard Harrington de la cartera de Empresa, Alistair Burt de la Cancillería, y Steve Brine del Ministerio de Salud- presentaron ayer sus renuncias para poder votar a favor de esa enmienda y en contra de lo que pedía el gobierno.

Mañana el debilitamiento de May y su incapacidad para dirigir el proceso del Brexit quedará al desnudo cuando la Cámara de los Comunes discuta y apruebe sus propios planes, independientemente de la hoja de ruta trazada por el gobierno.

Durante toda la tarde hasta las 19 (16 hora argentina), los diputados presentarán sus propuestas y, luego, el presidente de la cámara, John Bercow, decidirá cuáles de ellas serán votadas.

Los diputados votarán al mismo tiempo y por escrito, por sí o por no, a todas las mociones que presente Bercow. Solo dos horas después se conocerán los resultados.

El plan es darle tiempo al gobierno de May para incluir las propuestas aprobadas a su hoja de ruta. Por eso, la Cámara de los Comunes solo volverá a reunirse el próximo lunes 1 de abril para una nueva ronda de «votaciones indicativas».

El objetivo es dirimir cualquier disputa que exista entre propuestas legislativas contradictorias o contrapuestas. En los hechos, los diputados se garantizaron otra jornada de control del proceso de Brexit por fuera de cualquier eventual iniciativa del gobierno.

May volvió a condenar este martes todo este proceso legislativo que creó la moción de anoche y lo calificó como un precedente «peligroso» e «impredecible».

«El gobierno seguirá pidiendo realismo; cualquiera de las opciones consideradas deben poder materializarse en las negociaciones con la UE», destacó un vocero del Ministerio para el Brexit, citado por la agencia de noticias EFE.

Los jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros de la UE acordaron el viernes pasado otorgar una prórroga al Reino Unido para cambiar la fecha del Brexit del próximo viernes 29 al 12 de abril, en principio.

Según esta prórroga, si para el 12 de abril May no logró aprobar el acuerdo que firmó con la UE, tendrá dos opciones: abandonar el bloque europeo sin un marco regulatorio definido o aceptar participar de las elecciones legislativas europeas de mayo y obtener una postergación del Brexit más extensa.

Si May logra antes del 12 de abril que el Parlamento apruebe el acuerdo de Brexit que ya rechazó dos veces, entonces tendrá hasta el 22 de mayo, justo antes de las elecciones legislativas europeas, para abandonar la UE de manera ordenada y consensuada.