El gobierno de Bolivia dio hoy el primer paso de su anunciado programa atómico con fines civiles, al firmar con la empresa rusa Rosatom los convenios para la construcción y la puesta en marcha de un centro de investigación nuclear en El Alto, ciudad aledaña a La Paz.

«Bolivia también tiene derecho a tener un centro de investigación en energía nuclear», afirmó el presidente Evo Morales tras firmar el acuerdo en un acto multitudinario en El Alto.

El mandatario aseguró que Bolivia, que hasta ahora es el único país latinoamericano que no tiene instalaciones de este tipo, tendrá el centro «más moderno y más grande» de la región.

Los convenios deberán ser ratificados por el parlamento y el gobierno en un plazo máximo de dos semanas, dijo Morales.

El proyecto incluye un reactor nuclear de investigación de baja potencia, un centro de ciclotrón-radiofarmacia, una planta multipropósito de irradiación y un laboratorio de investigaciones y capacitación.

El centro costará 300 millones de dólares, ocupará 15 hectáreas y su construcción estará concluida en cuatro años.

El reactor «contribuirá al desarrollo científico y tecnológico en los campos de la medicina, industria, ciencias ambientales, biológicas, físicas, químicas, petroquímicas, hidráulicas, geológicas y de materiales mediante la imvestigación básica y aplicada», reportó la agencia noticiosa estatal ABI.

Asimismo, Morales anunció que la semana próxima emitirá un decreto para crear una nueva empresa estatal que administrará el centro de investigación nuclear.

La construcción del centro forma parte del plan civil de energía atómica con fines pacíficos anunciado por el gobierno boliviano en 2014 y que tiene el respaldo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de las Naciones Unidas.