El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hizo este lunes un llamado a Rusia y China para entablar conversaciones sobre el control de armas nucleares, y afirmó que especialmente Moscú tiene esa responsabilidad desde su invasión a Ucrania iniciada en febrero pasado.

Biden explicó que su Gobierno está dispuesto a «negociar rápidamente» un texto que sustituya el Nuevo START, el tratado que limita el armamento nuclear intercontinental de Estados Unidos y Rusia y que expira en 2026.

«Rusia debe demostrar que está dispuesta a reanudar los trabajos sobre el control de armas nucleares», afirmó Biden en un comunicado, antes de las discusiones globales en la ONU para examinar el histórico Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), informó la agencia de noticias AFP.

«Pero la negociación requiere un socio dispuesto a operar de buena fe. Y la agresión brutal y no provocada de Rusia en Ucrania ha destrozado la paz en Europa y constituye un ataque a los principios fundamentales del orden internacional», agregó.

China ha estado aumentado en los últimos años su capacidad nuclear, aunque su arsenal al día de hoy es mucho menor que el de Estados Unidos y Rusia.

Biden aseguró que China tiene el deber, como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, «de participar en conversaciones que reduzcan el riesgo de un error de cálculo y aborden la dinámica militar desestabilizadora».

«No hay ningún beneficio para ninguna de nuestras naciones, ni para el mundo, en resistirse a un compromiso sobre el control de armas y la no proliferación nuclear», aseguró.

El presidente estadounidense afirmó que las potencias nucleares, Rusia y Estados Unidos especialmente, tienen la responsabilidad de marcar la pauta y asegurar el cumplimiento del TNP, con el que se trata de frenar la propagación de la tecnología de armas nucleares en todo el mundo.

«La salud del TNP siempre ha reposado en límites de armas significativos y recíprocos entre Estados Unidos y la Federación Rusa. Incluso en el punto álgido de la Guerra Fría, Estados Unidos y la Unión Soviética fueron capaces de trabajar juntos para mantener nuestra responsabilidad compartida de garantizar la estabilidad estratégica», recordó Biden.

«El mundo puede confiar en que mi Gobierno seguirá apoyando el TNP y tratando de fortalecer la arquitectura de no proliferación que protege a los pueblos de cualquier parte», sostuvo.