El despliegue de las fuerzas militares de Estados Unidos y de la OTAN cerca de las fronteras de Rusia genera desde hace un tiempo inquietud y preocupación en este país.

En tal sentido, el presidente ruso, Vladimir Putin, manifestó la inquietud al afirmar que “es muy preocupante la acumulación de agrupaciones militares de EE.UU. y la OTAN inmediatamente cerca de las fronteras de Rusia, así como la realización de ejercicios a gran escala, incluso no planificados».

Además, Putin describió el panorama al respecto del despliegue de elementos del escudo global antimisiles de Estados Unidos al referirse a “las ya emplazadas en Rumania y planeadas para la instalación en Polonia, lanzadoras Mk-41, adaptadas a los sistemas de ataque Tomahawk”.

«Si esta infraestructura va avanzando, si los sistemas de misiles de Estados Unidos y de la OTAN aparecen en Ucrania, su tiempo de vuelo hasta Moscú se reducirá a 7-10 minutos, y si se despliegan armas hipersónicas, a cinco minutos», advirtió Putin, que calificó esta situación de «grave desafío para la seguridad de Rusia».

Según el portal RT, Putin acentuó que si “incluso si Estados Unidos proporcionara garantías jurídicas en materia de seguridad, no serían muy confiables, puesto que Washington abandona los acuerdos fácilmente.

Más adelante, el presidente ruso subrayó: «Esperamos unas negociaciones constructivas y significativas con un resultado final visible que, en un plazo determinado, garantice una seguridad igual para todos. Nos esforzaremos por conseguirlo».

En este contexto, Putin considera como lo más importante:

– Asegurar que continúe el suministro planeado y equilibrado de nuevos tipos de armas y material bélico a las Fuerzas Armadas del país, con atención especial a los sistemas de alta precisión y a avanzados medios de comunicación, reconocimiento, navegación y mando.

– Priorizar en el entrenamiento operativo y de combate el aprendizaje de nuevos tipos de armas y de nuevas formas y métodos de operación de fuerzas.

– Desarrollar sistemas de apoyo a la toma de decisiones por comandantes de todos los niveles, particularmente a nivel táctico, e introducir en estos sistemas tecnologías de inteligencia artificial.

– Además de asegurar la eficacia de algoritmos de acción y automatización en todos los niveles, es necesario tomar en cuenta que los conflictos modernos no siguen patrones convencionales, por lo que hay que prestar atención a la formación de habilidades diversificadas de comandantes y a la capacidad de tomar decisiones no estandarizadas.

– Desarrollar la cooperación militar y técnico militar con los países miembros de la Organización de Cooperación de Shanghái y la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva, priorizando el reforzamiento de la defensa de la Unión de Rusia y Bielorrusia.