Una multitud de fieles de iglesias evangélicas y militantes de las organizaciones denominadas «provida» se concentraban esta tarde en el Obelisco para rechazar el proyecto de ley de legalización del aborto.

A pocos días de que el Senado debate el proyecto de legalización de la interrupción voluntaria del embarazo, miles de personas se movilizaron al microcentro para participar de un acto de rechazo a esa iniciativa.

El pastor evangélico Osvaldo Carnival, uno de los organizadores de la marcha advirtió: «A los políticos, si promueven leyes abortistas, no cuenten con nuestro apoyo».

El presidente de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas, Rubén Proietti, sostuvo que «todo el mundo habla de aborto» pero «los pastores evangélicos son los que tienen que tratar con la mujer que no quiere el embarazo y después con la que ha abortado» y agregó: «Nadie habla de lo que es el síndrome post aborto».

Proietti afirmó que la función de las iglesias evangélicas es «contener» a la mujer con un embarazo no deseado y «mostrarle el valor de la vida y darle todo el apoyo», al tiempo que contó que «varias iglesias tienen un sistema de atención al embarazo no deseado, todo con dinero propio de las iglesias, acá no hay ninguna asistencia social».

De la movilización participan también legisladores nacionales como la senadora Miriam Boyadjian y la diputada Cornelia Schmidt- Liermann y el intendente del partido bonaerense de Merlos, Gustavo Menéndez.

Según informaron los organizadores del acto, muchos de los manifestantes llegaron hasta el microcentro de la Ciudad de Buenos Aires desde el conurbano bonaerense a bordo de unos mil micros, mientras que desde el interior del país llegaron otros 500.