Un informe publicado por Zonaprop Index señala que el alquiler promedio de febrero en la ciudad de Buenos Aires se ubicó en 33.357 pesos mensuales, lo que marcó un salto de 65% anual.

Según publicó el portal Iprofesional, en un año todos los barrios porteños mostraron incrementos en los alquileres superiores a 50%. En Puerto Mader, por ejemplo, se ofertaron a 67.062 pesos mensuales; en Palermo, a 38.727 pesos; y en Nuñez, los inmuebles para alquilar se publicaron en promedio a 38.404 por mes.

Carlos Cansinos, de deinmobiliarios.com, opinó que desde que se aprobó la ley de alquileres hay 8 meses de atraso. Razón por la que, dice, en la práctica los nuevos contratos se pactan con ajustes en los precios por lo que no se pudo aumentar durante el periodo de congelamiento.

«Una persona que comenzó a alquilar en julio sabe que tiene un aumento por delante y qué hay un decreto que se lo congela. Pero los alquileres que se iniciaron antes de la vigencia del régimen de alquileres, o sea de julio de 2020, se ajustaban en general semestralmente. Hoy por hoy no se están haciendo, y esas diferencias en algún momento se tienen que pagar», afirmó Cansinos.

El hombre de deinmobiliarios.com puso como ejemplo el siguiente contrato de abril de 2020:

$18.000 por 6 meses: pagó por cada semestre $108.000.

Sin embargo, para el segundo semestre del contrato, el alquiler debería haber subido a $21.240, con un total semestral de $127.440.

En el tercer semestre, el inquilino debería haber pagado $25.063,20, con un total semestral de $150.379,20.

Y en el cuarto semestre, el alquiler debió haber sido de $29.574,58, con $177.447,46 totales en los seis meses.

Por este motivo, el valor total del contrato tendría que haber sido de $563.266,66, pero el inquilino pagó $432.000 en los dos años que duró el contrato. La diferencia que el dueño del departamento le exigirá al inquilino será de $131.000 aproximadamente.

«La diferencia la debe abonar en algún momento», enfatizó Cansinos ante ese medio.

Si bien el ajuste anual de los contratos por ley rondará un 30% anual, «lo que está diciendo el mercado es que cada vez que un propietario vuelve a poner su departamento en oferta, incrementará el precio por encima de la inflación para cubrirse», justificó ante Iprofesional Cansinos.

El ajuste por ley es anual, y los contratos ahora son cada 3 años, con lo cual este ajuste -dijo- se hace 3 veces.

«Lo que ahora será difícil es la renovación de contratos, porque será más conveniente volver a poner el inmueble en el mercado con un nuevo precio», insistió Cansinos.

«Recién veremos los efectos en el 1° semestre de 2023, aunque la situación viene difícil, cómo una olla a presión», concluyó.

Por su parte, Matías Celasco de la consultora inmobiliaria CBRE, que como Cansinos tiene un claro posicionamiento sectorial al momento de exponer su visión del escenario actual, dijo al mismo medio que la ley de alquileres y el registro de alquileres de la AFIP tienen especial efecto en el precio del «día uno».

«Esto es así porque los propietarios se cubren del mayor riesgo inflacionario porque los contratos obligatoriamente pasaron de dos a tres años», argumentó Celasco, quien también manifestó que «se trata de un mercado que se autorregulaba y ahora, en cambio, los alquileres deben ajustarse obligatoriamente por el RIPTE, que es un índice que combina la inflación y la suba de salarios». La «autorregulación» que nombró tiene resultados cuantificables: según datos del gobierno argentino -expuestos en spetiembre del año pasado- actualmente hay un déficit habitacional cercano a las 3,8 millones de hogares.

Además, según el ejecutivo consultora inmobiliaria CBRE los costos del registro de los alquileres en AFIP también influirán en el precio del «día 1», ya que los propietarios lo incluirán en lo que pagará el inquilino.