Un grupo de padres y madres de estudiantes de la Escuela Superior de Comercio presentó un petitorio ante las autoridades del establecimiento para que se establezcan burbujas sanitarias de 300 chicos por turno. Actualmente son unas siete burbujas de 15 alumnos cada una, pero aseguran que las condiciones del edificio permitirían ampliar la cantidad.

«Comenzamos este reclamo en el momento que se aprobaron los protocolos para la presencialidad en el año 2021. De entrada nos pareció absolutamente insuficiente lo que se aprobó. Estamos en el piso mínimo de programación de presencialidad. Hoy los chicos tienen una programación de dos días por semana. Si se tienen en cuenta feriados y demás, de acá a fin de mes están viniendo un solo día por semana», se quejó María Laura Pividori, madre de una alumna del 4to año del Superior.

Los padres fueron recibidos por los directivos del establecimiento, quienes les aseguraron que darán curso a su petición. En la misma línea, aclararon que las modificaciones no dependen de decisiones internas de la institución, sino que responden a las medidas aprobadas por el Consejo Federal de Educación. 

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Al momento de detallar las modificaciones que solicitaron en el petitorio, Pividori contó que pretenden que «los chicos vengan semana de por medio con el máximo de capacidad de aulas que tienen por turno acá en el Superior que son 20 aulas, divididos los grupos en un 50 por ciento».

«Hoy son 600 chicos a la mañana y a la tarde otros 600. Pretendemos que sean 300 en una burbuja y 300 en otra. Actualmente hay siete burbujas de 15 chicos cada una, lo que da 105 chicos por día. Como padres, nos resulta insuficiente», acentuó.

Las personas que se acercaron al Superior de Comercio para reclamar modificaciones en la modalidad de cursado llevaron un petitorio firmado de manera virtual por 336 padres. «Igual empezamos el lunes pasado, la página está abierta para que todos los padres que estén de acuerdo con esta propuesta puedan subir su firma», indicó Pividori.

Madres y padres de alumnos del Superior sostienen que el edificio cuenta con los recursos físicos y humanos para llevar adelante las actividades con las nuevas burbujas. La idea es aplicar una alternancia de una semana al 50 por ciento de la población académica, tanto a la mañana como a la tarde.