Por Alejandro Maidana

“La revolución no es hecha para el pueblo por el liderazgo ni por el liderazgo para el pueblo sino por ambos, en una solidaridad inquebrantable. Esta solidaridad sólo nace del testimonio que el liderazgo dé al pueblo, en el encuentro humilde, amoroso y valeroso con él”,  Paulo Freire.

¿El argentino es un pueblo solidario? ¿Se trata de la ausencia del estado o del estado presente? ¿Cuánta gente en situación de calle existe? Estas pueden ser sólo algunas de las preguntas que la sociedad suele hacerse en su andar cotidiano.

Lo cierto y concreto es que existe un índice de pobreza, de marginalidad y de exclusión que alarma. En un marco actual sumamente complejo, la situación de los más vulnerables se agrava. El estado, que llega de manera asistencialista, lejos está de ser el sanador de una enfermedad a la cual le esconden la cura.

¿Sólo la revolución cultural nos pondrá a salvo? Quizás, pero se debe activar y presionar en conjunto sobre ese sueño que todavía permanece lejos, y que no es otro que el de la equidad social.

Conclusión dialogó con Vero Manara, una mujer inquieta que, movilizada por su enorme corazón, ha generado una nueva red solidaria. “Gracias al grupo de tapas, el cual generamos para tenderle una mano a la familia de Aquiles Donato, pudimos consolidar el mismo y ahora vamos por más. Debido a la enorme demanda de ayuda que muchos rosarinos requieren, amalgamamos al grupo lo que denominamos “Manos Solidarias Rosario”. El objetivo es seguir asistiendo a los que más necesitan. En eso enfocamos a los comedores más olvidados y a la gente que se encuentra en situación de calle. Con respecto a esto último, la idea es cubrir sábados y domingos, dos días que suelen quedar sin cobertura alguna por parte de aquellos que durante los restantes cinco se encargan de abastecerlos con diferentes viandas”, dijo.

La pobreza en el país abraza al 30% de la población, mientras la malnutrición afecta al 40% de los niños y adolescentes. Un cuadro de situación complejo, el cual cuesta torcer producto de la desidia y la falta de compromiso sincero por parte de aquellos que ostentan el poder de cambiarlo.

Consultada sobre la financiación y la puesta en marcha, Verónica explicó: “La idea es comenzar este domingo. La financiación será a través de las tapitas que seguiremos incansablemente acopiando para luego venderlas y por rifas, que nos hemos encargado de vender . El tema de la cocina será llevada adelante por las mujeres que conformamos este movimiento. Somos unas 20 aproximadamente. Cabe destacar que durante la semana hicimos un relevamiento de la gente en situación de calle para saber el número a cubrir. En la actualidad ya estamos asistiendo a dos familias del barrio toba”.

La cobertura zonal de la ración de comida caliente que repartirá Manos Solidarias Rosario ya está diagramada: “Será en peatonales Córdoba y San Martín, Terminal de Ómnibus y Monumento a la Bandera a partir de las 19. Quiero destacar que aparte del necesario plato de comida, también estaremos acercándoles abrigos y por sobre todas las cosas, un abrazo fraterno y una mirada profunda hacia lo más remoto de su corazón”.

Verónica Manara en reiteradas oportunidades destaca la importancia de juntar gente, de juntar manos y conciencia solidaria más que tapitas. La idea saludable de entender esta movida no sólo como un acto de amor y asistencialismo, sino también como una colectora que pueda acercar a ese pueblo al final de la carretera, llamado cambio de paradigma.