Los dos primeros voluntarios, que cursaron la enfermedad y se recuperaron, respondieron a la convocatoria realizada por el Ministerio de Salud, a través del Cudaio, y donarán plasma sanguíneo por aféresis en dos de los efectores oficialmente constituidos para el procedimiento: el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria y el Heca de Rosario.

El Director del Cudaio, Dr. Mario Perichón, explicó que “estamos arrancando con esta fase de un ensayo clínico nacional sobre la utilidad de plasma de convalecientes en pacientes con la enfermedad activa. Este tratamiento se está realizando en distintos lugares del mundo, por eso nos enorgullece la calidad técnica y el conocimiento de nuestros profesionales. Se trata de una práctica compleja que integra distintos pasos hasta la obtención final del plasma”.

La condición de ser pacientes recuperados no es el único criterio de selección de los donantes. Al momento de llegar a la máquina de aféresis, donde se separa el plasma del resto de la sangre, el donante debió pasar primero por un protocolo minucioso que, esencialmente, garantiza la viabilidad y seguridad del material biológico extraído.

En primer lugar el donante debe reunir los requisitos habituales de cualquier dador de sangre: entre 18 y 65 años de edad, más de 50 kg de peso y buen estado clínico general.

Adicionalmente, se requiere un certificado médico de alta clínica del Covid-19 y dos testeos negativos con 24 o más horas de diferencia. Previo a la extracción, además, se realizan algunos análisis de laboratorio para confirmar la aptitud clínica del donante, descartar otras posibles patologías transmisibles, evaluar su utilidad y tipificar para qué tipo de receptor será compatible.

Una vez extraída por aféresis, la unidad de plasma se fracciona en una cabina de alta seguridad biológica y queda disponible para utilizarse en el tratamiento de casos específicos de Covid-19.

El Dr. Perichón agregó que “hace unas semanas nuestra provincia fue convocada por autoridades nacionales a participar en el protocolo de investigación que se utilizará en el contexto del Ensayo Clínico Nacional para evaluar seguridad y eficacia del plasma de convalecientes en el tratamiento de enfermos por Covid-19, y luego de preparar el equipamiento y los protocolos procedimentales, por fin se concretan las primeras donaciones. Al igual que en tantos otros aspectos de la pandemia, trabajamos en colaboración con la Secretaría de Salud de la Municipalidad de Rosario”.

Y amplió que “el Cudaio tendrá, entre otras responsabilidades, la obtención del plasma, su procesamiento y resguardo en el Centro Regional de Hemoterapia de Rosario, su distribución hacia centros de tratamiento y el seguimiento con hemovigilancia del producto obtenido”.

En un comunicado oficial del Ministerio de Salud de la Nación se indica que “el fundamento del ensayo clínico y tal como están orientadas varias de las experiencias internacionales es ver de qué manera el uso del plasma, con un paciente con Covid-19 con enfermedad activa que está internado y que no está aún en terapia intensiva, evita la progresión de la patología respiratoria y que ese paciente no ingrese a terapia intensiva con respirador artificial”.