Este jueves, en la reunión del Instituto Manuel Oribe del Partido Nacional, el presidente de Obras Sanitarias del Estado (OSE) de Uruguay, Raúl Montero expresó que, tras dos noches de lluvias favorables, la emergencia se corre unos días.

Esta información intentó llevar calma al pueblo uruguayo que se enfrenta a una crisis hídrica sin precedentes. En ese sentido, en una conferencia de prensa, Montero  explicó que la capacidad de la planta potabilizadora de Aguas Corrientes está «al límite» y que por eso se necesitan nuevas plantas, como la de Arazatí, en la localidad de San José, que tomará agua del Río de la Plata.

Por otro lado, el funcionario uruguayo destacó que la planta de Aguas Corrientes en Canelones es responsable de suministrar agua a Montevideo y su área metropolitana, donde se encuentra aproximadamente el 60% de la población de Uruguay. También señaló que actualmente se enfrentan a un triple desafío que involucra dificultades en el acceso al agua cruda, el proceso de potabilización y el transporte del agua.

«OSE está viviendo, creo que de la historia reciente, uno de los peores momentos. La situación que afecta a más de la mitad de la población del país es muy dura. Y creo que a pesar de todas las dificultades, que eso esté pasando, casi que me exime de la importancia del proyecto que aquí nos convoca», dijo y se refirió a la planta potabilizadora que se va a construir en Arazatí, por la cual ya se presentaron dos consorcios empresariales al llamado a licitación.