El director general de Swiss Medical Group, Miguel Blanco, aseguró hoy que las prepagas aumentaron el año pasado por debajo «de la inflación específica del sector» y, tras advertir sobre el riesgo de que se «produzca una quiebra generaliza», pidió «esfuerzo» al sector público.

«Aumentamos menos de la inflación específica del sector, alrededor de un 50 por ciento, pero tenemos medicamentos que aumentaron en torno al 80, los insumos relacionados con el dólar subieron más que la inflación», afirmó.

En ese sentido, alertó que «no sólo la medicina privada, sino todo el sector de salud» se encuentra con una «ecuación deficitaria».

«Necesitamos una solución integral. Hay que buscarle la vuelta», consideró y apuntó: «El caso más peligroso es que se produzca una quiebra generaliza, algo que no está muy lejos».

En diálogo con AM 750 subrayó que «muchas clínicas privadas que trabajan con obras sociales o el PAMI no han podido pagar los aumentos de enero y febrero porque no tienen fondos para hacerlo».

«El sector está en emergencia impositiva», sostuvo y analizó que se encuentra «muy complicado».

Además, manifestó que «muchos de los sectores, sobre todo los que trabajan solamente en la parte asistencial y no tienen un financiador detrás, están en problemas».

«Todo el sistema privado de salud está muy complicado desde antes por el incremento de los costos disparados por la devaluación», insistió y reclamó «fomentar la articulación pública y privada».

Para Blanco, «el tema no pasa por el aumento de los ingresos, sino por los costos», por lo que fustigó: «Los impuestos son una carga muy pesada en el sector porque el IVA en gran parte no es trasladable a los precios».

También se quejó del «impuesto a débitos y créditos e ingresos brutos» al evaluar que «se hacen muy pesados».

«La situación económica impide o limita el aumento de las tarifas, entonces hay que buscar soluciones por otro lado», indicó.

«Estamos planteando que los saldos que nos quedan del IVA, como en otras actividades, se permita utilizar para las cargas sociales. Hay varias medidas que venimos planteando y no hemos tenido respuesta», resaltó y cuestionó: «Estamos viendo que la frazada corta siempre se soluciona aumentando impuestos al sector privado y las personas».

Según su criterio, «no hay ningún indicio de que el gasto público se reduzca».

«Si estamos en un esquema de solidaridad, todos deben hacer su esfuerzo y no lo vemos desde el sector público», enfatizó, mientras puntualizó: «Las medidas que se están tomando afectan a los tres grandes generadores de divisas, que son el campo, la industria de conocimiento, y minería».

Así, Blanco remarcó: «Hay mucho margen de reducción en el gasto público. Tienen que dar algún indicio de participar en el esquema de solidaridad».