Por Marcelo Campanella

Uno de los aspectos de Plutón planeta transpersonal y regente de Escorpio tiene que ver con temas inherentes a la sexualidad; no nos olvidemos que en la mitología antigua, Plutón, Dios del inframundo para los romanos y Hades para los griegos, había secuestrado y/o robado a Perséfone, la hija de Ceres, diosa de la agricultura, llevándola consigo a su reino subterráneo en donde abusa de ella (acomete contra su doncelles) y termina convirtiéndola en su mujer y reina del inframundo, por ende.

Estas historias tienen que ver con ideas de raptos, secuestros, enamoramientos prohibidos… abusos sexuales y tintes de seducción entre personas no siempre de determinada paridad. Saturno, Sr. del Karma, es el regente de Capricornio, signo de tierra y elevación, de gran altura en la cúspide cósmica, marcando a su vez el pago y recompensa de nuestras acciones y el transcurso del tiempo, a veces favorable y mayormente cíclico. La conjunción de ambos en el signo de Capricornio, signo que tiene que ver con el pago de nuestras facturas, de otras épocas, ha traído a la actualidad viejas historias de abusos que ven la luz hoy en día, entre personas de diferentes estratos, condiciones, edades y situaciones que revelan hechos impunes (a Plutón le gusta esconderse, no nos olvidemos que rige a escorpio, signo de regeneración, sexo, muerte y hechos oscuros).

Hoy en día ha puesto en el tapete una gran cantidad de hechos que delatan a numerosas personalidades, de carácter público, político y social, con el fin de que sus acciones sean juzgadas en diversos espacios (culturales, televisivos, judiciales, etc.) ¿Llegarán estas acciones a ser decididamente condenadas a través de un tribunal judicial? ¿O serán los acusados repudiados socialmente? Veremos, ¿un importante procedimiento de ajustes de cuentas por las inocencias robadas y un resarcimiento moral de sus víctimas, o todo quedará en aguas de borrajas? Los desafíos de exposición , enjuiciamientos a través del paso de los años, logrando reconstruir hechos de vieja data, la aparición de testimonios verdaderos, aspectos de legalidad que tienen que ver con prescripciones, etcétera. ¿Será realmente factible? ¿O todo volverá a quedar en casos irresueltos? Es una incógnita que en el 2020 tendrá que develar el paso de Júpiter sumándose a estos dos planetas, como representante de lo justo y legal, aportando su genuino poder de mostrar las cosas como realmente fueron.

Por un lado el sector de las víctimas tendrán su derecho a justificar sus problemas actuales y de arrastre por los actos sufridos por un sector de seres abusivos, que decididamente eligieron satisfacer su apetito carnal. Por el otro lado, la sociedad se replanteará viejos temas que se tenían por tabú. Por otra parte, la cadena de acciones y resarcimientos karmáticos mostrará una realidad oculta durante siglos para prevenir a las generaciones futuras de que eso no se hace y si se debe hablar.