La pirotecnia genera un desequilibrio en la conducta de la mayoría de personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) debido a su hipersensibilidad auditiva, por lo que sus familiares impulsan la campaña #Pirotecniacero para el evitar su uso que, aseguran, «causan en realidad un daño a toda la población y al ambiente».

«Todas las personas tenemos hipersensibilidad a estos sonidos, por lo que la pirotecnia, en realidad, nos hace mal a todos. Ahora bien, el problema es que a muchas de las personas con TEA estos sonidos abrumadores les impactan en sus comportamientos», explicó a Télam Horacio Joffre Galibert, presidente de la Asociación Argentina de Padres de Autistas (Apadea), impulsora de la campaña junto a la Federación Argentina de Autismo (Fadea).

Galibert, papá de un joven con TEA, recordó que «la iniciativa de realizar esta campaña surgió de un grupo de padres, y desde la Asociación recogimos esa inquietud y comenzamos a acompañar porque todos comprendíamos la situación».

«Para la mayoría de las personas las fiestas son un momento esperado, para nosotros son una tortura porque ya sabemos que nuestros hijos pasarán una mala noche», indicó y aclaró que «si bien no todas las personas con TEA se alteran, muchos sí lo hacen y algunos llegan a situaciones muy graves como las autolesiones golpeándose la cabeza».

Señaló que «durante estos años hemos visto que las personas tienen más conciencia sobre los daños que causa la pirotecnia, y también comienzan a comprender un poco más la problemáticas de las personas con TEA»:

Galibert detalló que «este año hemos viajado por todo el país y recibimos el apoyo de muchos municipios que nos escucharon y nos brindaron su apoyo, por ejemplo, la semana pasada estuvimos en Corrientes».

En el comunicado difundido por la organización se recomendaba a los padres y familiares «prevenir a la persona con TEA sobre lo que va a suceder, explicándole que se trata de una celebración», así como «tomar las prevenciones en el lugar donde se realizan las reuniones familiares, en algunos casos la necesidad de blindar algunas ventanas o espacios para prevenir el ruido de estruendos y petardos».

«En los casos más extremos se pueden pensar en tapones para los oídos o cascos para evitar lesiones», describió Galibert.

También se recomienda hablar con los vecinos para explicarle la situación.

Esta semana, el Partido de la Costa emitió una ordenanza que prohibió el uso de pirotecnia, sumándose a otros distritos bonaerenses que ya lo tenían restringido (Junín, Chascomús, Lezama, Florencio Varela, General Alvarado, Bahía Blanca, Coronel Rosales, Coronel Pringles, Avellaneda, Bragado, Berazategui, Salliqueló, Rivadavia, San Pedro, Ramallo, Olavarría, Chivilcoy y Berisso).

En la provincia de Mendoza, casi la mitad de los departamentos tiene prohibido el uso de estos productos; al igual que cinco departamentos de la provincia de San Luis.