Los gremios del transporte terrestre, aéreo y marítimo anunciaron hoy un paro nacional de 24
horas para el 31 de marzo próximo, en repudio a la falta de respuesta del Gobierno para que se modifique el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias.

Además, los sindicatos del sector pretenden que el Poder Ejecutivo otorgue un «aumento de emergencia» a los jubilados y frene la inflación.

Así lo decidieron este jueves en un plenario que se realizó en el predio de la Unión Tranviarios Automotor (Uta) ubicado en la localidad bonaerense de Moreno, del cual participaron 25 gremios del sector.

De este modo, el paro afectará los servicios de colectivos, micros, trenes, subtes y aviones durante el último día del mes que viene.

Los gremios convocantes forman parte de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (Catt) y, a su vez, integran tanto la CGT oficialista como la opositora.

En diciembre último, los mismos sindicatos que ahora convocan al paro habían amenazado con realizar una medida de fuerza durante los últimos días de 2014.

Pero el Gobierno logró desactivarla tras anunciar que el pago del medio aguinaldo quedaba eximido de Ganancias. En este marco, el acuerdo para realizar una huelga refleja un «relanzamiento» de la CATT, un espacio cercano al líder de la CGT opositora, Hugo Moyano.

Los referentes de ese espacio son el secretario general de La Fraternidad, Omar Maturano, y su par del Sindicato de Dragado y Balizamiento, Juan Carlos Schmid.

Quienes se abstuvieron de adherir al acuerdo son los sindicalistas cercanos a Antonio Caló, el secretario general de la CGT oficialista: entre ellos, se encuentran el taxista Omar Viviani, el ferroviario Sergio Sassia y los marítimos Omar Suárez y Marcos Castro.