José Alejandro «Jochy» Cervetti tiene 36 años y hace 19 que vive en Estados Unidos. Al igual que muchos argentinos, fue uno de los tantos que junto con su familia tuvieron que migrar para conseguir un futuro mejor.

Corría el año ’98 cuando sus padres comenzaron con problemas económicos. En ese momento, y con algunos contactos en el país del Norte, el padre de «Jochy» decidió vender todo, comprar los pasajes y dejar su Buenos Aires natal para partir a la ciudad de Chicago donde luego comenzaría a trabajar como repostero en una panadería.

Pasaron 19 años desde que José llegó a Chicago pero asegura que nunca logró «acostumbrarse» al clima de esa gran ciudad.

«Al principio cuando lo ves de afuera, se ve todo lindo. Pero cuando tenés que apalear la nieve por cuadras, o te quedas atascado con el auto o chocas por lo patinoso que se pone el piso, lo sufrís», así describió el joven de 36 años a la ola de nieve y frío ártico que esta sufriendo Chicago.

La ola de frío extremo congeló el medio oeste de Estados Unidos con temperaturas más frías que en la Antártida. Tanto así que se paralizó la vida de millones de ciudadanos. Se cerraron comercios, se suspendieron las clases, además de los vuelos y todo tipo de actividades.

«Estos días aprovechamos a descansar con la familia, fueron dos días a puro Netflix. Ni siquiera Mac Donald abrió sus purtas y eso que nunca cierra», describió José su vida en compañía con la nieve y remarcó que el frío, se siente «muy fuerte».

Si bien, según contó el joven argentino, entre el año 2010 y 2011 hubo una tormenta de nieve que llevó a que «se acumulen montañas de nieve de entre 3 y 4 pies de altura» y tuvieran que resguardarse en su casa por al menos una semana, aseguró que «nunca en su vida» había sufrido tanto frío como ahora.

«Aunque pasen los años, nadie se acostumbra a este clima», concluyó.