El 19 de agosto de 1990 se sancionaba la Ley Nacional de Sida 23.798, sin dudas que la misma, hace más de tres décadas resultó un bálsamo de contención para aquellas personas que vivían con el virus.

Al mismo tiempo se declaraba de interés nacional a la lucha contra el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida. Es claro y contundente que aquella ley representó, hace más de tres décadas, un gran avance para toda la sociedad; pero hoy distintas organizaciones y redes de personas que viven con VIH reclaman que se apruebe una nueva Ley Integral, de enfoque social, para mejorar la calidad de vida y prevenir muertes evitables.

En ese marco más de 30 organizaciones de la sociedad civil y referentes sociales se movilizaron ayer al Congreso Nacional, para reclamar la sanción de una nueva ley de respuesta integral al VIH, hepatitis virales, tuberculosis y las infecciones de transmisión sexual (ITS), un proyecto consensuado cuyo tratamiento es parte del temario de las sesiones extraordinarias que aún no comenzaron.

En la movilización, Matías Muñoz referente de la Asociación Ciclo Positivo, dijo que: «El proyecto de Ley nacional de respuesta integral al VIH, Hepatitis Virales, ITS y Tuberculosis va a volver a perder estado parlamentario la semana que viene por las mezquindades políticas de los distintos bloques que deberían estar trabajando en sus bancas y sesionando por los derechos de la sociedad en su conjunto».

El lema de la movilización fue «¡No podemos seguir esperando!» y se le sumaron distintos hashtags que se utilizaron en redes sociales. Todas las organizaciones presentes realizaron un claro pedido a los diputados y diputadas para que sesionen, traten y aprueben la nueva ley de VIH, que es una ley escrita por y para las personas con VIH y hepatitis virales y que además toma las otras infecciones de transmisión sexual en sus disposiciones.

Un obstáculo adicional de esta necesaria iniciativa es que el proyecto de ley de VIH, Hepatitis virales e ITS necesita pasar por la comisión de Salud y obtener dictamen para que se debata en la Cámara, pero aún no se han conformado las comisiones a las que se giran los proyectos de ley antes de ser debatidos en el recinto.

Las sesiones extraordinarias fueron decretadas el 26 de enero y debían comenzar el 1 de febrero y extenderse hasta el 28 del mismo mes, aunque aún no fueron iniciadas.

La movilización fue federal, y se realizaron actividades en diferentes puntos del país como Chaco, Corrientes, San Juan, Mendoza, San Luis, Córdoba, La Pampa, Misiones, Entre Ríos, Santa Fe y Chubut. En la ciudad de Rosario pudo verse a las distintas agrupaciones, desplegar una bandera en la Plaza Libertad ubicada en calle Mitre e Ituzaingo.

Desde las organizaciones sostuvieron además que «mientras los diputados sólo centran sus esfuerzos en ver quién logra presidir cada comisión sin llegar a un acuerdo, cada año mueren 5.100 personas por causas relacionadas al VIH y a las Hepatitis Virales en nuestro país”.

Esta importante y renovada ley busca mejorar la calidad de vida de todas las personas con VIH, Hepatitis virales, infecciones de transmisión sexual (ITS) y Tuberculosis, garantizando el acceso a la salud integral. La misma contempla el ámbito socioeconómico, proponiendo soluciones efectivas ante la discriminación laboral y la vulnerabilidad social. Además, posee perspectiva de género y de derechos humanos, ofreciendo herramientas para acabar con el estigma y la discriminación.