El arzobispo de Rosario monseñor Eduardo Martín , visitó la sede de la Asociación de Empleados de Comercio ubicada en Corrientes 450.

El religioso, disertó sobre “La cultura del encuentro”, luego de bendecir la mutual de los mercantiles en un inmueble contiguo a la sede sindical.

En rueda de prensa, previo a la charla que compartió con un nutrido auditorio, el arzobispo destacó los valores que promueve el santo Padre acerca de «la necesidad de constituir una cultura que en el modo de vida y en el encuentro con el diferente poder hacer juntos una sociedad más justa y más fraterna, para ser un pueblo unido y que progrese tanto material como espiritualmente».

Monseñor Martín, dijo que el Papa convoca a «salir de nosotros mismos porque en el fondo el cristianismo es eso, es Dios que ha salido al encuentro del hombre, por ese motivo todos los cristianos tenemos que salir al encuentro de nuestros hermanos, aunque seamos diferentes o distintos pero buscar ese encuentro».

En el mismo sentido, Martín, señalo que debe existir un compromiso para generar las «condiciones de diálogo que permita construir la paz y el bien común, buscando lo que es justo,  bregando para que la economía esté al servicio del hombre y no solamente del lucro y la ganancia, pero que también haya condiciones objetivas para el trabajo y la educación».

Consultado sobre la condiciones de violencia social que se vive en nuestra ciudad, el prelado manifestó que «los seres humanos son contradictorios, y desde la mirada de la fe hay una herida en el corazón del hombre, lo que ensucia al hombre es lo que sale el corazón del hombre, peleas, engaños, crímenes, violencia, nacen de un corazón herido y hay que sanarlo porque las mismas fuerzas que manejan la historia son las mismas fuerza que manejan el corazón del hombre».

Y agregó con énfasis que «por todo lo que vemos hay que buscar la justicia y la equidad para que no haya violencia, y que todas las personas tengan una oportunidad, porque eso pacifica el corazón».

El clásico de fútbol que vivenció la ciudad el último domingo, no fue pasado por alto, sobre el tema, Monseñor Martín, afirmó que al deporte «hay que darle el lugar que tiene, porque por sí mismo no da la felicidad, y está bien que la comunidad participe, pero cuando se mezclan otras cosas se distorsiona, a punto tal que la rivalidad y la cohexistencia de antes ya no es posible, los hechos de violencia que se produjeron son la confesión implícita del fracaso y un retroceso.»

Sobre el luctuoso suceso que vivió Rosario cuando la explosión de calle Salta, el sacerdote, consideró que acompaña «la justicia que buscan las familias, la celeridad y medios para que se pueda encontrar una justicia posible», seguidamente adelantó que en los días próximos «se hará una misa para el consuelo de los familiares y para pedir justicia».

En cuanto a los temas vinculados con la realidad ambiental mundial, referenció la Encíclica «Laudato si», que es un documento adecuado «al momento, que contiene la convicción del Papa de que debemos cambiar de mentalidad, puesto que el mundo no esta separado de la dignidad de las personas, más sin son pobres porque merecen una vida digna».

Finalmente, Monseñor Eduardo Martín, reflexionó sobre la pobreza, las condiciones de vida en los asentamiento, la falta de salubridad por el deterioro del ambiente, y llamó a tener cuidado con la agricultura, porque hay que salvaguardar los suelo para el futuro, e instó a no olvidar que en el presente todos somos corresponsables de lo que hacemos para las generaciones venideras