La Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro aceptó como particular damnificada en la causa que investiga la muerte del Diego Maradona a una de sus hermanas, Rita Mabel Maradona, quien está representada por Matías Morla, el último apoderado y abogado del «10», informaron fuentes judiciales.

El fallo fue dictado por la Sala III de la mencionada cámara, con la intervención de los jueces Carlos Fabián Blanco y Celia Margarita Vázquez, quienes de esta manera revocaron la decisión del juez de Garantías 2 de San Isidro, Orlando Díaz, de rechazarla como parte en el proceso y avaló la apelación que había formulado el socio de Morla, el abogado Yamil Castro Bianchi.

«Kity» -tal como le dicen- Maradona (67) se transformó así en la tercera querella que tendrá este expediente, ya que también fueron aceptadas como particulares damnificadas Dalma y Gianinna Maradona, las hijas del «10» con Claudia Villafañe, y el primero en ser aceptado había sido «Dieguito» Fernando, el hijo menor que el exfutbolista y entrenador había tenido con Verónica Ojeda.

«Estimo que las alegaciones efectuadas por la Sra. Rita Mabel Maradona logran abastecer las exigencias previstas normativamente para poder considerarla legitimada para asumir el reclamado rol de particular damnificada en este proceso. Ello así, toda vez que fundamentó adecuadamente haber sido alcanzada por los efectos dañosos del hecho que aquí está siendo sometido a investigación», dice uno de los párrafos de la resolución.

Los camaristas consideraron como fundamentos: doctrina, jurisprudencia nacional e internacional, normas de Tratados Internacionales, las Constituciones Nacional y Provincial, el código de procedimiento penal bonaerense y la Ley Nacional nº 27.372 llamada «de los derechos y garantías de las personas víctimas de delito».

El juez Díaz, cuando rechazó el planteo de ser particulares damnificadas de cuatro hermanas de Diego –Claudia Mora, Ana Estela, María Rosa y Rita Mabel Maradona-, había considerado que había otros familiares, como los hijos, con «mejores derechos».

Esa resolución fue apelada por el abogado Castro Bianchi sólo en nombre de Rita Mabel, en un escrito en el que señalaba que «la escueta resolución del magistrado se asimila más a un intento de declaratoria de herederos propia del fuero civil, que a la resolución a la que se le solicitó que se avoque».

«¿Qué quiere decir el magistrado? Entiendo que interpreta que no me encuentro afectada por el deceso de mi hermano. Cosa por demás dolorosa que no hace más que revictimizarme frente al suceso», decía el escrito.

«Debo padecer ahora no sólo la situación en que me encuentro por la pérdida de mi hermano, sino también, que se me niegue el derecho a ser tenida por particular damnificada», señalaba otro de los párrafos.