Por Gisela Gentile

Más de 30 agrupaciones de la diversidad y la disidencia sexual fueron parte del Torneo Regional por la Inclusión que se desarrolló a finales de octubre pasado. La edición Buenos Aires 2021 se realizó en dos días, y contó con la participación de 1.650 personas en 10 disciplinas.

Si bien esta competencia federal agrupó a referentes deportivos, y de gran nivel de todo el país, el objetivo primordial no fue la competencia en sí, sino el porqué de la misma. Un torneo que fue pensado con el objetivo claro de promover la empatía, la diversidad de identidades y fortalecer la convivencia y el respeto dentro del ámbito deportivo para la comunidad LGBT+ y la sociedad en general.

Rosario tuvo a dos representantes que fueron parte del seleccionado argentino de hockey que se consagró campeón de este hermoso y diverso torneo. Alessandro “Lookii” Barberis y Emanuel Alexis Ojeda son jugadores del club Provincial, y juntos se animaron a participar por primera vez de una competencia de estas características. Con todo el empuje y apoyo de sus compañeros y el cuerpo técnico, se adentraron a esta nueva experiencia que seguramente los marcará de por vida.

Este año, Alessandro “Lookii” Barberis comenzó a ser convocado por el seleccionado argentino LGBT. Su director técnico Sergio Rotman, quien, junto a su equipo, habían visitado la ciudad por un torneo regional, lo invitó a unirse. “Me comentaron sobre este grupo cuando vinieron a la ciudad para jugar un partido entrenamiento, en mi caso particular atajé para mi club (Provincial) ya que habían venido con sus dos arqueros. Fue una linda jornada deportiva, y me quedé sorprendido con las ganas del equipo argentino y la intención de salir a jugar”, enfatizó en diálogo con Conclusión.

Fue allí donde surgió la propuesta de integrar el seleccionado LGBT que entrenaría el día siguiente en el estadio mundialista de hockey Luciana Aimar. “Habíamos sido citados con mi compañero Alexis, pasamos una hermosa jornada a puro ritmo y fundamentalmente nos sentimos muy cómodos e integrados con el grupo. Unos meses después recibo nuevamente la convocatoria del entrenador para jugar otro torneo”.

Torneo Regional por la Inclusión

En el Centro Recreativo Nacional (Ce.Re.Na) comenzaría una nueva experiencia con el equipo de Hockey LGBT. “Concentramos enfrente del predio de AFA en Ezeiza, realmente quedé fascinado con ese predio, donde más allá del torneo, atesoro los momentos compartidos con el grupo”.

En la llegada a la villa Olímpica las emociones invadieron los cuerpos de estos jugadores que empezarían a experimentar un mundo deportivo completamente nuevo. “En el comienzo del torneo ya nos trasladamos al parque olímpico, el predio realmente fue una locura, se me pone la piel de gallina al recordarlo, nunca imaginé poder pisar semejantes canchas”.

El primer partido fue victoria ajustada 1 a 0 para el seleccionado argentino, ya en el segundo encuentro, si bien no lograban asociarse del todo, la ventaja nuevamente fue para la albiceleste por 2 a 0. “En el tercer encuentro nos empataron sobre la hora, pero más allá de los resultados no puede dejar de destacar lo que fue la experiencia en en CeNARD, desde la comida, el predio, la atención, en fin, el cariño que recibís cuando estás ahí. Haber pisado esos estadios fue uno de los logros más importantes de nuestra vida deportiva”.

El camino hacia la consagración, y un sueño que se comenzaba a convertir en realidad. “El ultimo día ya era las semis y la final. Fuimos nuevamente al CeNard, logramos llegar a la final, en mi caso particular nunca había logrado llegar a una instancia así, estaba ansioso y muy nervioso. Pudimos consagrarnos campeones con una victoria por 4 a 0”, agregó Barberis entusiasmado.

El torneo Regional por inclusión no solo hace referencia al colectivo LGBT, sino que está apuntado a todos aquellos que deseen ser parte. Sin sectarismos ni faltas creencias, una competencia abierta a toda la sociedad a toda esa sociedad. “Lo que se busca es la inclusión de la persona sea cual sea su motivo, sexual de género u otras. Hay muchas formas, por lo cual hay que seguir fomentando el respeto, la diversidad e inclusión”.

Si bien la fecha coincidió con los días del festejo del orgullo, al torneo podía inscribirse quien así lo deseara, no era solo LGBT. “Acá viene la gran problemática, porque he recibido comentarios de la índole de que estos torneos en vez de incluir excluyen, porque supuestamente sectorizábamos quien podía o no jugar. Y realmente es todo lo contrario, el torneo se basa en el orgullo e inclusión LGBT, pero eso no significa que sea sólo para esa comunidad sino todo lo contrario. En el torneo había grupos donde había compañeros heterosexuales y otros donde su mayoría lo era, por ello, insisto en que no era excluyente”.

Al finalizar el torneo los equipos tuvieron una charla con deportistas de elite que comentaron como fueron sus experiencias en torno a expresar su identidad, orientación o expresión de género. “Muchas y muchos deportistas compartieron sus experiencias personales en torno a si lo contaron o no, cómo se sintieron, qué les pasó y otras vivencias. Allí salieron muchas situaciones como la de las chicas trans que según la medición de hormonas puede o no jugar en equipos de mujeres, situación por demás de injusta”.

A la hora de preguntarle si volvería a hacer la experiencia e integrar el equipo argentino LGBT, el arquero comentó que “no lo dudaría un segundo, claro que sí. Me llevo la experiencia compartida con un grupo maravilloso. Me hicieron sentir seguro, incluido, y feliz. El compañerismo fue el eje de ese torneo. Para aquellos que se sientan discriminados, les digo que no se lo guarden, que hablen y que no permitan que nadie los haga sentir inferior o lo excluya. Todo es posible si así lo decidimos, en mi caso haber encontrado este grupo significó lograr mi objetivo a nivel deportivo que me complementó en la vida. No tengan miedo, anímense a hacerlo”, concluyó.

Quien también quiso aportar su experiencia vivida y compartida, fue Emanuel Alexis Ojeda jugador de Provincial, y campeón junto al seleccionado argentino LGBT. “No sabía que existía un equipo LGBT, lo vi en Instagram y empecé a preguntar. Fue allí donde me dijeron que era un equipo que más allá de la competencia, el objetivo era la diversidad. Desde ese momento empecé a preguntar los pasos a seguir para ser parte”.

Durante toda la charla, tanto Emanuel Alexis Ojeda como Alessandro Barberis destacan la figura de su entrenador en Provincial, Patricio Rambaudi, quien en todo momento los alentó y les brindó la confianza necesaria para que se abrieran a conocer ese nuevo camino que, quizás sin pensarlo, los marcaría para siempre.

En torno al Regional disputado en Buenos Aires, Ojeda quiso dejar una reflexión final. “Los chicos fueron muy buena onda, realmente nos alentaron y apoyaron desde el minuto cero. Lo que compartimos a nivel humano fue inolvidable, parecía que nos conocíamos desde siempre. Uno debería sentirse libre siempre, más allá de nuestra condición sexual, más allá de lo que uno elija o quiera ser. Tenemos el derecho a ser queridos y ser libres para querer, y sin dudas que el fin de este grupo por la diversidad, representa eso”, concluyó.