El jefe de la Prefectura Naval Paraná, Eduardo Esquivel, confirmó hoy que la búsqueda de la joven de 22 años que cayó con su auto a un arroyo de la capital entrerriana el sábado pasado se extendió hasta las ciudades de Diamante, Victoria, Rosario y San Lorenzo.

Fiorella Furlán es buscada intensamente por bomberos, buzos tácticos, la Policía, vecinos y navegantes, tras el fuerte temporal que azotó la capital provincial el fin de semana, con más de 200 milímetros caídos en pocas horas.

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«Emitimos un aviso a los navegantes que transitan por el río Paraná para que en caso de que divisen algún cuerpo o algo que se asemeje a las características de Fiorella den aviso al 106», indicó Esquivel y afirmó que dieron «intervención a las Prefecturas que están hacia el sur de Paraná».

En ese sentido, dijo a la prensa que alertaron a las sedes de PNA de las ciudades de «Diamante, Victoria, Rosario y San Lorenzo».

Esquivel sostuvo que la búsqueda se realiza en agua y tierra, «tanto en la desembocadura como en los kilómetros hacia abajo» del río Paraná, teniendo en cuenta «la velocidad de la corriente» en el momento del hecho.

La joven circulaba con su automóvil Suzuki Fan el sábado por la tarde por la calle Gálvez, cuando a pocos metros de la avenida Ramírez de Paraná, el agua del desbordado arroyo Antoñico hizo que cayera.

Bomberos Voluntarios de Paraná desplegaron unos 15 hombres en el operativo, más ocho buzos tácticos y también arribaron Federaciones de Bomberos Voluntarios de distintas localidades.

Asimismo, la Policía de Entre Ríos dispuso la búsqueda con efectivos de la comisaría sexta de Paraná, cadetes provinciales y drones, mientras que también colabora personal municipal y vecinos.

El automóvil de la joven fue encontrado vacío con su parabrisas roto horas después, a 300 metros del puente donde cayó.

Un vecino dijo ser testigo del hecho, y detalló que cuando vio que el auto comenzó a caer, dio aviso al 911 e intentó ayudar.

«Me toca muy de cerca porque vi cómo se cayó al agua, corrí y me metí en el lecho del arroyo donde el agua me daba a la cintura, pero la vegetación no me dejó avanzar», declaró en diálogo con Canal Once.

«Ella iba con el celular encendido porque se veía la luz adentro del auto mientras flotaba y se la llevaba la correntada»