El 50% de la región núcleo no recibió precipitaciones en el último fin de semana y el especialista en agro-clima, José Luis Aiello alerta que hay altas posibilidades de que un bloqueo afecte seriamente la llegada de lluvias al menos por los próximos 10 días de febrero.

Así lo expresó la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario al afirmar que el fin de semana pasado los núcleos de tormentas siguieron instalados en el norte del país.

Pero hacia el sur, en la franja central de la región pampeana, la circulación de aire frío produjo algunas lluvias de montos escasos o nulos en gran parte del territorio.

En este difícil contexto climático que atraviesa la región pampeana, y en un momento crítico donde están en juego los rendimientos de soja en Argentina, Aiello alerta por «un fenómeno que puede inhibir los frentes de tormentas».

A mediados de enero el especialista había considerado que el fenómeno La Niña se había intensificado y que en este mes no se iba a producir un cambio sustancial de las lluvias.

También había explicado que en febrero, La Niña seguiría siendo una protagonista indeseable, pero que observaba activos los mecanismos regionales que seguían aportando agua a Córdoba y Santa Fe.

Sin prever mejoras sustanciales en el régimen pluviométrico, destacaba que era muy positivo que sigan operando estos frentes, aunque actúen a pequeña escala.

«Si se mantienen las actuales circulaciones regionales, por efecto del Atlántico, podemos ver un mes (febrero) no tan severo», advertía Aiello hace 15 días.

Pero este efecto del Atlántico es el que podría quedar inhibido de acá en delante; por esto es que febrero podría volverse un escenario aún más complicado para el sector agrícola.

En ese contexto, Conclusión consultó al meteorólogo Luis Blotta Stengel quien coincidió con el especialista Aiello y ratificó sus predicciones: “Estamos atravesando desde la ciudad Reconquista hasta Bahía Blanca y desde el mar argentino hasta el fondo de La Pampa, períodos de sequía intercalados con una insuficiencia de lluvia”.

“Para el que veranea es estupendo porque tenes soleado 15 días seguidos, pero para el chacarero es terrible y se encuentra lagrimeando”, ejemplificó y en seguida explicó que “la Niña débil afecta a 40 millones de hectáreas de productores, o sea que cada día de sequía pierden 90 kilos por hectárea de cultivo y el más afectado es el maíz, que tiene un período de floración extremadamente corto y si justo coincide con la sequía, se pierde el 50% o más de la cosecha”.

No obstante Blotta Stengel fue optimista y señaló que “este período bravo ha sido por suerte muy corto en relación a otros períodos de Niña débil” y destacó como buena noticia que “para mayo del 2018 se espera que salgamos definitivamente de este período de Niña débil para dar lugar al neutro”.

En ese sentido, el meteorólogo alertó sobre posibles inundaciones durante ese período. “A la provincia de Santa Fe la situación neutro la inunda. Es precisamente lo que ocurrió cuando inició en mayo de 2016 y terminó en octubre del 2017, le provocó enormes inundaciones y anegamientos por la zona de Arroyo Seco, Pueblo Esther”, advirtió Blotta Stengel para concluir.