Dos incendios desatados en la provincia de San Luis entre la medianoche del viernes y el mediodía del sábado, “consumieron más de 300 hectáreas”, afirmó a Télam el jefe de emergencia de San Luis Solidario, Adrián Heredia.
El primero de ellos tuvo lugar en la localidad de La Carolina, al norte de la provincia: allí el fuego que se inició en la zona de montaña, consumió postes de luz y tendidos eléctricos, lo que dejó mantuvo a la localidad sin servicio por algunas horas.
Tras una jornada completa de trabajo, y cuando ese foco ígneo fue controlado, las dotaciones de bomberos de El Trapiche, El Volcán, La Carolina, la policía provincial y San Luis Solidario debieron volver al trabajo para sofocar otro siniestro que se inició en la zona de Juana Koslay, a menos de 20 kilómetros de esta capital.
En el lugar, un vecino inició el fuego que se propagó por el viento y produjo la quema de más de 35 hectáreas, con varios focos que pudieron ser controlados con la asistencia de dos aviones hidrantes.
El calor que, superó ayer los 33 grados en la provincia, hizo más dificultoso el trabajo de los bomberos, lo mismo que el viento norte, que pobló de cenizas el cielo puntano.
En la actualidad ambos incendios se encuentran controlados y en guardia de cenizas, ya que las condiciones del clima no han mejorado y las guardias temen por el reinicio de algún foco.
Heredia aseguró a Télam que son “más de 300 las hectáreas perdidas durante este fin de semana. La gente esta agotada pues el clima jugó en contra, pero somos optimistas y creemos que lo peor ya pasó”, dijo el funcionario.
