El Ministerio de Salud de Santa Fe elevó este martes las recomendaciones a tener en cuenta para evitar complicaciones ante la ola de calor que azota al territorio local. Según indicaron desde la cartera sanitaria, los cuidados deben ser aun mayores en los niños y adultos mayores, que no tienen que esperar a sentir sed para hidratarse.
«Hay un pronóstico que anuncia altas temperaturas. Es muy importante recordar que tenemos dos grandes grupos de riesgo: los más pequeños y nuestros adultos mayores. La percepción de la sed por parte de ellos no es siempre la misma. Por eso no hay que esperar a que tengan sed para que se hidraten. Hay que tratar de ofrecerles agua a lo largo de todo el día, por lo menos dos litros y medio«, resaltó el subsecretario de Promoción de la Salud de Santa Fe, Sebastián Torres, en declaraciones a Conclusión.
El funcionario santafesino remarcó especialmente que los dos litros y medio deben ser de agua y no de bebidas azucaradas, gaseosas o alcohol. Por otro lado, indicó que es importante consumir frutas y verduras, ya que no solo ayudar a nutrir el organismo, sino que también colaboran con la hidratación y bajan la temperatura corporal.
A la vez, Torres recomendó que aquellos que hacen actividad física al aire libre, lo hagan evitando el horario de 10 a 16. Además, destacó la importancia de usar repelente y protector solar. En cambio, para los que realizan ejercicio en espacios cerrados, sugirió que apuesten por lugares ventilados.
«En caso de estar expuestos al sol, es muy importante usar ropa clara. Estas temperaturas sorprenden, pasó lo mismo el verano pasado. Recuerdo que los primeros días de enero de 2022 tuvimos una ola de calor muy parecida a la de ahora o peor. Hay que elevar cuidados, las medidas que podemos tomar están al alcance de todos», dijo el subsecretario de Promoción de la Salud.
«Va a hacer mucho calor -agregó-, y no queremos que ningún abuelo ni ningún pequeño se sienta mal y necesite atención médica. Igualmente, si la necesita, es muy importante estar atento a los signos y los síntomas de un golpe de calor y rápidamente llamar a un servicio de emergencia».
Cabe recordar que el número de la central de emergencias es el 107. Las personas que requieran atención médica también pueden acercarse a las guardias de cualquier efector público o centro de salud.
«Hay que tomar mucha agua, habitar lugares frescos, y frente a una situación en la que nos encontremos con una persona que esté padeciendo o desarrollando un golpe de calor, hay que sentarlo en un lugar ventilado, fresco, hidratarlo y llamar a la emergencia», concluyó Torres.
