El ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, Sergio Bergman, instó a Salta a dejar sin efecto los permisos de autorización de desmontes en esa provincia. La cartera lo hizo mediante la Resolución 56/2018, publicada en el Boletín Oficial de la Nación, por lo que queda sin validez la iniciativa salteña, que se daban en el marco de los decretos provinciales 2211/10 y 3136/10.

El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable remarcó que son incompatibles con las disposiciones de la Ley número 26331 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos, pero además va en contra de las disposiciones del Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema).

También instó a la provincia a restaurar las más de 40.000 hectáreas desmontadas hasta el momento bajo estas autorizaciones y prohibió la emisión de certificados de exportación de palo santo provenientes de estas áreas.

La cartera que encabeza Bergman remarcó que las autorizaciones otorgadas por medio de estos decretos modifican regresivamente y de manera relevante el ordenamiento territorial de la masa forestal aprobado por la Ley provincial número 7543.

Los decretos salteños fueron aprobados en 2010, con el objetivo de recategorizar zonas rojas y amarillas mediante un procedimiento particular. Si bien dichas normas fueron derogadas en 2014 por la misma provincia (decreto 3749/14), mientras tenían vigencia se autorizaron cambios de uso de suelo en 32 fincas, sobre alrededor de 80.000 hectáreas de bosques protegidos en zonas rojas y amarillas.

Asimismo, de esas 80.000 hectáreas, en la actualidad se encontraban ya desmontadas más de 40.000. Sin embargo, de ejecutarse las autorizaciones restantes se sumarían más de 33.000 hectáreas de pérdida de bosques de alto valor de conservación, entre las que se encuentran los desmontes de la finca Cuchuy, denunciados por organizaciones de la sociedad civil.