Organizaciones sociales y campesinas realizaron esta tarde un «verdurazo» frente al Congreso Nacional en reclamo de la reglamentación de la Ley de Agricultura Familiar y por la «aplicación de políticas» de fortalecimiento de las economías regionales, entre otras demandas.

La protesta se desarrolló frente al Congreso de la Nación, bajo el lema «Nosotros no somos el problema, somos parte de la solución». Agregaron, la principal exigencia es la aplicación de políticas de fortalecimiento de las economías regionales, sostienen las organizaciones.

Referentes del Movimiento Popular La Dignidad y de la Federación de Organizaciones de la Agricultura Familiar indicaron que «La feria de la agricultura familiar se ha instalado frente al Congreso con un nuevo ‘verdurazo'».

Además, añadieron que entre el amplio abanico de reclamos del sector figuran la «regularización dominial de la tierra, contratando trabajadores y trabajadoras agrimensoras, para iniciar las mensuras donde no hay conflictos legales; la recuperación de la maquinaria que se encuentra con problemas y que no se puede utilizar por falta de financiamiento y la reglamentación del Consejo de Agricultura Familiar Campesino Indígena», sostienen los referentes.

Asimismo, las organizaciones reclaman la reglamentación de la Ley 27.118 de Agricultura Familiar, la «continuidad de las obras de provisión de agua potable en el interior del país», entre otras demandas.

También, impulsan la aplicación de un Programa Nacional de Mercados Alimentarios de Cercanía y la incorporación de la Federación de Organizaciones de la Agricultura Familiar al Consejo Nacional del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).

Por su parte, Miguel Fernández, presidente de la Federación de Organizaciones Nucleadas en la Agricultura Familiar, indicó que la idea central de la protesta es «mostrarles a todos de que nosotros, trabajadores y comerciantes, podemos contribuir para bajar la inflación, frente al alta de los precios en los alimentos que hay en el país».

«Hemos traído alimentos de todas las provincias, alimentos que producimos nosotros y que, por no tener las herramientas administrativas, políticas y legales para poder industrializar los alimentos y darle valor agregado, estamos obligados a venderles a los intermediarios; y los grandes y poderosos supermercados le ponen el precio que ellos quieren, el precio que mejor va a sus bolsillos», sostuvo Fernández.