Por Federico Morel

La sangre de cordón es la que circula por los vasos sanguíneos de la placenta y el cordón umbilical. Habitualmente, se desecha junto a la placenta cuando nace el bebé. Esta contiene gran cantidad de células progenitoras hematopoyéticas (CPH), conocidas popularmente como células madre por su capacidad de renovación de las células sanguíneas. Su principal característica es que son células inmaduras que pueden dividirse y diferenciarse para dar origen a todos los tipos celulares maduros de la sangre: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.

Estas células son beneficiosas si se trasplantan a pacientes que padecen enfermedades congénitas o adquiridas de la médula ósea, como talasemia, leucemia, entre otras. El trasplante permite producir nuevas células sanguíneas sanas, imprescindibles para la vida. En casos urgentes y en niños, el trasplante de células de sangre de cordón umbilical presenta más ventajas que el trasplante de médula ósea completa, porque se reducen las complicaciones y aumenta la supervivencia del paciente trasplantado.

El acto de donar esta sangre voluntariamente, resulta muy provechoso para quienes esperan, en calidad de urgencia, un trasplante de médula ósea que, hasta hace muy poco tiempo, era el único que brindaba estas células regenerativas, pero también es muy satisfactorio para quien realiza la donación.

Cabe destacar que esta acción se realizaba desde el año 1996 pero solo en los partos que tienen lugar en familias con un integrante que necesitaba o ya había recibido un trasplante de médula ósea.

Este es el caso de Eliana Fornasiere, residente de la ciudad de Paraná, quien hace un año decidió donar la sangre del cordón umbilical al nacer su hijo Amaro, la cual fue la primera en la provincia de Entre Ríos. Esta semana recibió un llamado donde le confirmaron que esa donación era altamente compatible para quedar a la espera de un posible paciente que la necesite en el Banco de Sangre del Hospital Garrahan.

Conclusión habló con la protagonista para conocer los detalles de su decisión. Dijo que «al principio había incertidumbre por el desconocimiento» pero luego, al informarse bien, les explicaron «que era un técnica super sencilla y que tenía muchísimos beneficios para la salud de la otra persona. Entonces el sí fue rotundo».  «Lo hicimos con mucho amor«, agregó.

Fornasiere destacó que «lo bueno de esta acción, que merece difusión», es que antes el cordón umbilical era desecho clínico. Hace poco que comenzó a investigarse. Y por otro lado, era privado, entonces si uno quería guardar estas células, costaba muchísimo dinero. Entonces nos parece muy lindo que podamos tener un banco público de recolección de células madre. La nuestra fue la primera donación que se hizo en un banco público y fue en Entre Ríos».

Al consultarle sobre que opinión tenía sobre la salud pública y la atención en las maternidades estatales, la mamá de Amaro expresó: «A mi me resulta esperanzador que haya sido en un hospital público. Nosotros, por decisión,quisimos atendernos en el hospital público San Roque de Paraná, porque creemos en la Salud Pública. Y la verdad que nos trataron excelente, tanto en el proceso del embarazo como luego en el crecimiento del bebé».

Y reflexionó: «Se realizan muchísimos partos en el hospital público, entonces pienso sobre cuantas madres podrían donar sangre del cordón umbilical, pero se encuentran en desconocimiento de esto».

Respecto a la sorpresa que tuvieron en los últimos días, cuando atendió un llamado del banco de sangre, Fornasiere detalló que «nos llamaron del Garrahan un años después y nos hicieron una serie de preguntas en cuanto al desarrollo de Amaro, cuestiones motrices más que nada que indican un desarrollo normal. Nos preguntaron sobre los controles médicos periódicos que le hacíamos. Ahí cerraron el ciclo del análisis de la sangre».

La donante de cordón umbilical, reflexionó: «Hay que confiar en la salud pública en primera instancia. Luego que es un acto hermoso por el hecho que podes dar esperanza a una persona que la necesita. Ojalá que podamos seguir replicando estas experiencias. También es importante que la información llegue a más madres para que sepan que pueden hacer la donación en el parto, ya sea por cesárea o natural, pero es una intervención muy sencilla».