Este sábado 3 de octubre se celebra el Día Nacional del Mutualismo, según lo establece el Decreto 22.946, promulgado el 25 de septiembre de 1945, donde se fija esta conmemoración para el primer sábado del décimo mes del año.

Creado para ocuparse del bienestar material y espiritual de las personas, el mutualismo es un sistema de carácter social que se consolidó a través del tiempo como una de las formas asociativas más eficaces para atender las necesidades de las comunidades. Actualmente abarca ramas como salud, educación, ayuda económica, turismo, farmacia, proveeduría, seguros, viviendas y un sinfín de servicios que llegan a sus asociados hasta los sitios más remotos.

En Argentina, desde mediados del siglo XIX diferentes entidades comenzaron a adoptar el mutualismo, convirtiéndose así en actores fundamentales en la construcción nacional. Hoy, muchas de esas primeras mutuales aún están vigentes brindando servicios a sus asociados y a la comunidad.

En la actualidad más de 10 millones de personas se encuentras asociadas a una mutual en el país y junto a las cooperativas generan 227.086 puestos de trabajo.

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En la situación que afronta la economía mundial, la Economía Social y Solidaria es la alternativa para generar mayor inclusión social. Es por eso que se alienta constantemente la integración de las entidades a través de alianzas estratégicas entre organismos del Estado, dirigentes y asociados. A partir de esa integración, se podrán resolver las necesidades básicas y las que hacen al bienestar común.

Por ese motivo, hay quienes consideran “fundamental” que el sector trabaje articuladamente con los gobiernos de distintos estamentos, considerando al Estado como un aliado natural para lograr el mayor beneficio para la comunidad.

Fabián Liberotti, delegado del centro sur de la provincia de Santa Fe del Inaes (Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social), que dependen del Ministerio de Producción de la Nación, comentó a Conclusión que “las cooperativas prestan gran cantidad de servicios a la sociedad, siempre constituyeron una base del desarrollo de numerosas actividades y favorecieron el crecimiento de muchos pueblos del país. Trabajan en forma colectiva y se articulo con el Estado y los gobiernos buscando el beneficio para la comunidad”.

A su vez, enfatizó que “el tercer motor de la economía social está dado por cooperativas y mutuales. Tenemos un Estado que se ha caído mucho y un sector empresarial que ha desaparecido una parte importante con el anterior Gobierno”.

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Liberotti destacó los beneficios que prestan las mutuales en todo el país, en cuanto a los servicios de salud, vivienda, turismo, educación, jardínes maternales, bibliotecas y deporte.

Por otra parte, mencionó el crédito «puente» implementado meses atrás entre diferentes mutuales para el sector vitícola mendocino. También remarcó el proyecto de «Inaes en la calle», que mesas de asociativismo en todo el país, donde están también las cooperativas, clubes y sindicatos, con el fin de generar proyectos en beneficio de la sociedad y crear más cooperativas que le den trabajo a la gente.

“Esto es de abajo para arriba, no de arriba para abajo. Tenemos que desarrollar un sistema de producción con el pueblo. Tenemos que trabajar con todos. Lo que necesita el país es administrar riqueza y no pobreza como se hace ahora”, cerró Liberotti.

Las mutuales representan la forma más auténtica de unidad de un grupo de personas interesadas en desarrollar, en toda su extensión y profundidad, la idea y la práctica de la solidaridad y el principio del más alto servicio. Una sociedad es más justa y equitativa cuando es solidaria, y el mutualismo hace más de dos siglos viene trabajando en ello.