La Fundación Clara Anahí ratificó este mediodía que la abuela de Plaza de Mayo María Isabel «Chicha» Chorobik de Mariani «sigue buscando a su nieta Clara Anahí», al tiempo que afirmaron que hubo «un error comunicacional bien intencionado» al emitir un comunicado que afirmaba la aparición de la mujer que desconoce su verdadera identidad.

«Fue un error comunicacional bien intencionado de personas que quieren mucho a Chicha», sostuvo el biógrafo y colaborador de la referente de derechos humanos, Juan Martín Ramos Padilla.

En una conferencia de prensa en la sede de la entidad, en La Plata, el joven periodista resaltó que «el Banco Nacional de Datos Genéticos cuenta con dos informes que dicen que esa persona (que se acercó a ´Chicha´Mariano) no es Clara Anahí».

Consultado sobre el estado de ánimo de la fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo, Padilla indicó que «´Chicha´ está muy triste, dolorida».

«Estamos preocupados por su salud, pero está con la misma fuerza de siempre para seguir luchando», subrayó.

Finalmente, manifestó que «hay un montón de cosas que no quedan claras» y se preguntó «cuál fue la sangre que se analizó en ese laboratorio» privado de la provincia de Córdoba que indicaba que había un 99,9 por ciento de probabilidades de que la mujer fuera la mujer desaparecida.

En tanto, el fiscal Pablo Parenti, titular de la Unidad Especializada en Casos de Apropiación de Niños y Niñas, aseguró hoy que en el Banco Nacional de Datos Genéticos “no hubo ningún error” en relación a María Elena Wehrli.

“El Banco Nacional de Datos Genéticos llevó a cabo todos procedimientos contemplados por la ley. No hubo ningún error en la identificación de esta persona que aseguró ser la nieta de Chicha (Mariani), remarcó Parenti en declaraciones a radio América.

El funcionario judicial contó que Wehrli, una mujer de 39 años oriunda de la localidad cordobesa de Marcos Juárez, se realizó en mayo pasado un examen genético en el Banco que resultó incompatible con los datos que allí se conservan.

“Esta persona concurrió al Banco y se llevó a cabo un análisis que dio negativo. Eso se lo comunicamos en junio”, relató Parenti.

El fiscal afirmó que las autoridades del Banco abrieron la entidad ayer, 25 de diciembre y comprobaron los resultados de ese análisis que se practicó Wehrli para corroborar la información que manejaban.

“Se buscó el análisis en el Banco, se corroboraron los resultados y volvieron a dar negativos. Por eso, cuando se conoció el anuncio desde la Fundación Anahí, se generaron dudas y debíamos aclararlas”, apuntó.

Parenti explicó que existen dos caminos para conocer la identidad de una persona que considera que puede ser hijo de desaparecidos durante los años del terrorismo de Estado.

“Quienes dudan de su identidad puede acercarse a la Comisión Nacional por el Derechos a la Identidad (Comadi) o la Justicia. Luego, se lleva a cabo un análisis en el Banco Nacional de Datos Genéticos. Esa información se cruza con todo lo que está guardado y se le informa a la persona en cuestión”, sostuvo.

El fiscal adujo “desconocer” los motivos que llevaron a Wehrli a presentar un estudio privado que aseguraba que era la nieta de Chicha Mariani, y ratificó que desde los organismos del Estado “se actuó bien”.

“La lección que deja este caso es que se deben seguir los procedimientos legales. Los organismos del Estado actuaron bien. Lo lamentable es que Chicha haya tenido que pasar por todo esto y siga sin encontrar a su nieta”, puntualizó.

Nota: El ADN de la supuesta nieta 120 dio negativo