«Resulta impostergable crear un marco reglamentario que permita un acceso oportuno, seguro e inclusivo y protector de quienes requieren utilizar el Cannabis como herramienta terapéutica». Esa frase está contenida en el decreto 883/2020, firmado por el presidente Alberto Fernández que busca regular en forma legal el cannabis medicinal, poniendo como prioridad el acceso a las personas con patologías que requieran su uso y la investigación médica. Las diversas organizaciones cannábicas de todo el país celebraron la decisión presidencial y consideraron que se trata de «un gran paso». Desde la Asociación Civil Miradas creen que se trata de una decisión «revolucionaria» que revitaliza la ley existente y la pone en otros términos.
«Es una gran noticia- expresó el titular de Miradas, Fabián Peralta a Conclusión. «Tenemos una ley nacional desde el año 2017, que se reglamentó en el gobierno del ingeniero Mauricio Macri, pero se reglamentó de forma muy deficiente, y en la práctica no se traducía en el acceso a las personas que necesitan el cannabis para uso terapéutico. Esta nueva reglamentación garantiza un acceso más democrático, porque establece la posibilidad del autocultivo, ya sea solidario, asociado o individua. Ahora falta ver qué cantidad de plantas, pero ya es un paso. Además, establece la venta en farmacias de distintos componentes para fórmulas magistrales y también establece que a la persona que no tenga obra social o posibilidad de acceder se le suminstre gratuitamente, con lo cual es un decreto que revitaliza la ley y la pone en otros términos».
Peralta hizo una valoración muy positiva del decreto porque «abre una posibilidad de un complemento terapéutico que hoy obligaba a muchas personas a estar en la ilegalidad o clandestinidad». «Además, había muchas personas que al no tener posibilidad de acceder al cannabis para sus dolencias, terminaban comprando productos adulterados, o utilizando cepas que no tenían los efectos necesarios aliviar sus patologías específicas».
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El referente de la Asociación Miradas recordó que en los momentos en que se encargaban de juntar firmas para que el laboratorio público de Santa Fe produjera el cannabis medicinal, cientos de personas que necesitaban medicinas con base cannábica se les acercaron para apoyar y difundir. «Todo tipo de personas, madres con hijos enfermos y también muchísimos adultos mayores a los que les hace falta para el tratmiento del dolor y de las enfermedades que tienen que ver con artritis o reuma».
En cuanto a qué es lo que queda por hacerse, Peralta señaló que, sin dudas, ahora se abre un camino muy largo. «Nosotros rescatamos que se dio un paso muy importante. Ahora, en Santa Fe falta la ley provincial que ya tiene la media sanción de los diputado, pero que aún on fue debatida en Cámara de Senadores. A nivel nacional, entendemos que va a haber todo un camino para que se efectivice y operativice lo que se firmó. Pero es un gran primer paso. También creo que nos debemos una ley integral de cannabis que también involucre el uso adulto y el uso industrial, al modelo de lo que hizo Uruguay, pero por ahora festejamos esto».
