Una nueva postergación para resolver de manera favorable el dictamen correspondiente al proyecto de modificación a la ley de agrotóxicos, desató profundas críticas en aquellos que vienen empujando la necesidad de obtener una respuesta.  Hace 15 meses que la misma espera en la comisión de Salud de la Cámara de Diputados, demasiado tiempo, si tenemos en cuenta que se debate sobre calidad de vida.

Con motivo de que no se realizan las sesiones ordinarias esta semana, la comisión presidida por Estela Yacuzzi no estará reunida para emitir el dictamen correspondiente tal como se les aseguró a los referentes de la Campaña socio ambiental. Si bien todo indicaría que entre miércoles o jueves de la semana entrante la respuesta final podría concretarse, el descreimiento se consolida.

También te puede interesar: Debate en la Legislatura de la Provincia por una nueva ley de agrotóxicos

Claramente la dilación atenta contra el interés máximo que puede perseguir una persona, el resguardo de su salud. Ha corrido mucha agua bajo el puente, este modelo productivo pudo desnudar todo su arsenal plagado de mezquindades. El avance incesante de la frontera sojera, viene acompañada por los desmontes y el enorme movimiento que generan las migraciones internas, personas desarraigadas a la fuerza que pasan a engrosar el frío número que arrojan las villas miserias de las grandes metrópolis.

La necesidad de hacer virar este barco timoneado por los intereses de unos pocos en detrimento de las mayorías, nos interpela de manera sistemática como sociedad. Para profundizar sobre el impacto que genera la dilación en torno al dictamen de la comisión de Salud, Conclusión pudo dialogar con Sergio Chapelet, alguien que vive en carne propia la desidia de las fumigaciones.

“La sensación es de bronca e impotencia, vemos que existe mucha indiferencia de gran parte de los actores políticos. Falta seriedad en la toma de decisiones, tienen que entender que esto no es un capricho, estamos peleando por la salud de cientos de miles que son los moradores de los pueblos del interior”, enfatizó uno de los hijos de Alcides Chapelet, quien falleciera a causa de las continuas aspersiones.

El poderío de los interés económicos en una batalla desigual, sobre esto indicó: “Sabemos de las presiones existentes, y que muchos tienen campos, pero deben responder por el pueblo, no por los intereses particulares que se anteponen a la salud. Es muy triste, tienen que entender que se puede producir sin venenos, pero sin salud no se puede vivir. Como hay productores abiertos al diálogo, hay verdaderos grupos mafiosos que no dudan en apretar o amenazar si es necesario”.

“Les pido que dejen los miedos si es que los están intimidando, ser valiente es vencer a los mismos logrando legislar por y para la salud”, concluyó Sergio Chapelet.

Los que también brindaron su postura en torno a un dictamen que se hace desear, fueron los ediles del FSP Carlos del Frade y Mercedes Meier, quién integra la comisión de Salud de la legislatura provincial.

“El miércoles 12 de septiembre se va a estar reuniendo esta Comisión y allí se le va a dar un dictamen favorable a la ley de agrotóxicos para prohibir la fumigación a 1.500 metros de los cascos urbanos, prohibiendo la fumigación aérea en toda la provincia de Santa Fe”, comentó del Frade.

De sortear los escollos que pueda tener en esta comisión, la esperaría una parada muy difícil en la de agricultura, “aquí es donde más presiones vamos a tener, donde  más intereses se van a manifestar. Igualmente la decisión política debe partir desde el gobierno de la provincia, que debe velar no sólo por la salud del medioambiente, sino también por la salud humana. Es por ello que tenemos confianza en que el 12 de septiembre el dictamen sea favorable”, auguró el legislador.

“En torno a estos proyectos, incluido el de Carlos del Frade, todos se encuentran en la comisión de Salud que yo integro. Existe un acuerdo para el despacho con las fuerzas que estamos a favor, pero lamentablemente la presidenta de la comisión viene dilatando la convocatoria para tratar el tema”, relató Mercedes Meier.

Las expectativas de que sea el miércoles 12 la reunión que habilite el despacho, es concreta: “De no surgir nada extraño, ese día estaremos firmando el dictamen favorable. Cabe destacar que después deberá pasar por agricultura, un lugar muy difícil, para terminar su derrotero en el senado. De todas maneras somos muy optimistas, ya que no existen muchos argumentos para que se opongan si tomamos como referencia el último juicio que pierde Monsanto en Estados Unidos, y la prohibición del glifosato tanto en Rosario como en la ciudad de Santa Fe”, concluyó la diputada.