Con actos en distintas ciudades del país, entre ellas Rosario, la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (Argra) recordará hoy el crimen del fotógrafo José Luis Cabezas ocurrido el 25 de enero de 1997 y reclamará a su vez la prisión efectiva de los condenados por el asesinato.

Bajo la consigna «No se olviden de Cabezas – Los ojos hablan», el acto central se realizará en Pinamar, y en Rosario la convocatoria es a las 19.30 en la Plaza Pringles, lugar donde fue colocada una placa en memoria del fotógrafo y donde se realizará el tradicional camarazo, convocado por el Sindicato de Prensa de la ciudad.

En tanto, el acto organizado en Pinamar contará con la presencia de la hermana de José Luis, Gladys Cabezas, quien acompañará a los trabajadores a repartir pinos y semillas de árboles para recordar al reportero gráfico.

Gladys Cabezas participará también, una hora antes, en el acto que se llevará a cabo en la cava del partido de general Madariaga, donde se encontró el cuerpo sin vida del reportero gráfico hace ya 19 años.

Como hecho destacado de este año, Cabezas será recordado a las 21 en el inicio de la jornada del Festival de Folclore de Cosquín, según adelantaron los organizadores.

En la misma provincia de Córdoba habrá otro homenaje a partir de las 11 frente a la Municipalidad de Villa Carlos Paz, en tanto en La Plata, la capital bonaerense, se lo recordará a las 13 en un monolito erigido en su memoria en las calles 6 y 51.

Mientras que en la ciudad de Buenos Aires se rendirá un homenaje en el barrio de Palermo, en el que reclamarán «que sus asesinos vuelvan a prisión para cumplir lo que resta de sus condenas».

«Vamos a recordar a José Luis y a reclamar que sus asesinos vuelvan a prisión para cumplir lo que resta de sus condenas», publicó en su página de Facebook el periodista Gabriel Michi, compañero de Cabezas durante la trágica cobertura de prensa de 1997.

El acto será en la Plaza Armenia, en Nicaragua y Malabia, a partir de las 18.30, convocada además de Argra por el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba), entre otras organizaciones.

Michi y Cabezas cubrían la temporada de verano en la costa atlántica para la revista Noticias de la editorial Perfil.

El cronograma de actos por Cabezas que se realizarán en todo el país se completa con los que tendrán lugar a partir de las 10 en la Plaza del Soldado de la ciudad de Santa Fe; a las 19.30 en la Plaza 25 de Mayo de la ciudad de La Rioja y a las 19 en la Casa Histórica de Tucumán. También habrá ceremonias en las ciudades de Salta a las 18.30 en la Plaza 9 de Julio; en Mendoza a las 13 en la Plaza Independencia; en el centro de Lincoln a las 20 y en Neuquén a las 10.30 en la Plazoleta José Luis Cabezas.

En un comunicado, Argra destacó hoy que “se hace imposible no recordar aquel 25 de enero de 1997 en donde secuestraron, torturaron, dispararon dos balazos en la nuca y prendieron fuego, aún con vida, a nuestro compañero”.

“Quizá suene un poco duro, pero así fue como sucedió. No fue otra vida, fue ésta. Es el peor atentado contra la libertad de expresión en democracia y es sin duda alguna, una clara violación a los Derechos Humanos. No solamente hacia José Luis sino hacia la sociedad toda, porque fue asesinado en el ejercicio de su profesión: Periodista”, subrayó.

En este marco, la organización de los reporteros gráficos argentinos señaló que actualmente “todos sus asesinos se encuentran en libertad, excepto uno que volvió a prisión por otro hecho. Por eso este 25 de enero todos Juntos Sembramos Memoria”.

José Luis Cabezas logró fotografiar en la playa de Pinamar al empresario Alfredo Yabrán, de quien no se conocía su rostro y a quien el por entonces ministro de Economia, Domingo Cavallo, había definido en 1995 como «el jefe de una mafia enquistada en el poder».

La foto fue tapa de una edición de marzo de 1996 de la revista Noticias, ilustrando una investigación sobre el empresario firmada por Michi.

«Sacarme una foto a mí es como pegarme un tiro en la frente», había dicho Yabrán en una entrevista, a las cuales accedía siempre y cuando fueran sin ser fotografiado.

El 25 de enero de 1997 Cabezas apareció asesinado en su auto incinerado en una cava de General Madariaga. Había recibido amenazas de muerte.

Yabrán fue investigado como autor intelectual del crimen, pero se suicidó el 20 de mayo de 1998, sin llegar a juicio. De los nueve condenados que tuvo el caso, ninguno cumple prisión efectiva.

En Rosario

Por su parte, el Sindicato de Prensa de Rosario emitió un comunicado acompañando la convocatoria, en el que señala que: «Cabezas fue muerto por ser periodista, por trabajar con la información a través de la imagen y de hacer visibles aquellos hechos y rostros que formaban parte de la realidad y por la que había recibido amenazas en los meses previos a ese 25 de enero de 1997. Su asesinato tuvo como telón de fondo la disputa entre el ex presidente Carlos Menem y el ex gobernador de Buenos Aires Eduardo Duhalde, con lo que la justicia actuó con extrema lentitud y todo sirvió como mensaje mafioso, aleccionador para los trabajadores de prensa y toda la sociedad: con el poder económico, financiero, político y mediático no se juega: se puede mirar, pero no se debe ver y mucho menos entender. Ya son muchos los años que pasaron y también las vidas ahogadas por ese mismo poder, la de la dirigente de las meretrices rosarinas, Sandra Cabrera, la de Jorge Julio López, testigo en el juicio que condenó al genocida Miguel Etchecolatz, la de Silvia Suppo, a la vez testigo y querellante en los juicios por delitos de lesa humanidad. Y es aquí que la Argentina revive un estado de pérdida de derechos, entre ellos el de la libertad de expresión y el derecho a la información».

«Los poderes entrelazados no descansan, sólo simulan haber bajado la guardia y eligen cuidadosamente a quienes los representan. Por eso en el primer día de gestión del gobierno de Mauricio Macri, el 11 de diciembre, se conoció uno de los decretos de necesidad y urgencia que ya iba contra la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y desde ahí los ataques fueron cada vez más fuertes hacia la norma que nunca reguló contenidos, pero sí quiso ponerle un límite a los monopolios y concentraciones mediáticas. Esa ley, deformada ahora por decreto, era una llave hacia la expresión de las voces más plurales y la posibilidad de que los distintos sectores y actores sociales tengan voz».

«Como cerraron los ojos de Cabezas, hoy se quiere tapar la capacidad de que los argentinos y argentinas construyan una visión crítica e integradora del mundo en el que se vive. Por eso la muerte de Cabezas no es sólo un recuerdo, sino que su trágico significado adquiere preocupante actualidad.

  • Por la defensa de la libertad de expresión y el derecho a la información
  • Por la plena vigencia de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual
  • Por la defensa de los puestos de trabajo

El acto en Rosrio está convocado a las 19.30 en la plaza Pringles donde se encuentra la placa que se colocó en memoria de José Luis Cabezas. Allí se realizará el tradicional camarazo